El arquitecto Harry Seidler se ha pasado más de 50 años viajando por el mundo y fotografiando extensamente los máximos logros de la arquitectura desde el año 3000 a. C. hasta la actualidad. Gracias al oportuno consejo de su hermano fotógrafo Marcell (“Utiliza solamente cámaras Leica y película Kodachrome que tiene buenas características de conservación en archivo”), la afición de Seidler pronto se convirtió en una verdadera pasión y, finalmente, en un impresionante archivo de la arquitectura mundial.

Las fotografías de Seidler ilustran la historia y el estilo, país por país, de la arquitectura en Europa, Oriente Medio, Asia y América. Dividido en capítulos por país, cada uno con una breve introducción que resume su historia arquitectónica, The Grand Tour ofrece a viajeros sedentarios, estudiantes, aficionados a la arquitectura e historiadores una oportunidad única de echar un vistazo a edificios de todo el mundo, ya sean antiguos, viejos o modernos, pero siempre espectaculares.

En la era del big data y la distribución digital de información, cuando las noticias viajan cada vez más rápido y los medios de comunicación compiten en Internet por un poco de atención, las infografías se han convertido en grandes protagonistas. Los gráficos, claros y concisos al mismo tiempo, pueden representar ideas abstractas, estadísticas complejas y descubrimientos de vanguardia por medio de formas sucintas, convincentes y a menudo visualmente magistrales que dan respuesta a nuestra necesidad de inmediatez así como a nuestro deseo insaciable por el detalle y el diseño atractivo. Cartógrafos, diseñadores, programadores, estadísticos, técnicos, científicos y periodistas han desarrollado la visualización del conocimiento hasta convertirlo en un nuevo campo de especialización.

Este amplio compendio examina la rica historia de la infografía y traza la evolución de la visualización de datos desde la Edad Media hasta su auge en la actualidad. A cargo de Sandra Rendgen, autora de los éxitos de ventas de TASCHEN Information Graphics y Understanding the World, este libro ofrece un magnífico resumen de la historia de la comunicación gráfica y reúne 250 ejemplo de cartografía, zoología y tecnología, entre otras disciplinas.

La colección abarca distintos ámbitos culturales y geográficos e incluye desde manuscritos cósmicos de la India y mapamundis japoneses hasta cartas de color alemanas y el Hombre de Vitruvio de Da Vinci. Bien sea un elaborado árbol genealógico o una representación minimalista de datos del maestro de la Bauhaus Herbert Bayer, cada una de las piezas es una obra maestra de precisión visual que pone de manifiesto la capacidad de adaptación de la infografía, así como su utilidad en campos tan distintos como la anatomía y la ingeniería aeronáutica. Entre las obras más destacadas se incluyen los atlas cosmográficos de Cellarius, los meticulosos estudios naturales del siglo XVIII y principios del siglo XIX de Ernst Haeckel y el mapa Dymaxion de Buckminster Fuller de la década de 1940. Las infografías están acompañadas de exhaustivas leyendas con información sobre los autores y los contextos histórico-culturales de las piezas, así como de un detallado ensayo introductorio.

Con su rostro colorado, cálido y apacible, que irradiaba luz, el presidente Mao Tse-tung era una figura omnipresente en los pósteres de la propaganda china impresos entre el nacimiento de la República Popular, en 1949, y principios de la década de 1980.

El presidente Mao, apodado "el Gran Maestro", "el Gran Líder", "el Gran Timonel" o "el Comandante Supremo", aparecía retratado como héroe histórico en todo tipo de situaciones (visitando fábricas, fumándose un cigarrillo con unos campesinos, junto al río Yangtsé en albornoz, a la proa de un barco o flotando entre un mar de banderas rojas), flanqueado por hombres de edad indefinida, fuertes y saludables, y por mujeres y niños masculinizados vestidos con ropas holgadas, grises y asexuadas. El objetivo de tal imaginería era mostrar al pueblo chino el comportamiento que se consideraba moralmente correcto y lo brillante que sería el futuro de la China comunista si todos unidos seguían el mismo camino hacia la utopía.

Este libro reúne una selección de obras de arte y objetos culturales de la propaganda china a todo color procedentes de la vasta colección de pósteres de Max Gottschalk, muchos de ellos sumamente raros.

En Maldicidade, la ciudad nunca duerme. Al amanecer o al anochecer, en Nueva York, La Habana, Savador de Bahía o Tokio, la atmósfera está cargada de anhelos, de aflicción por la soledad y de esperanzas que nunca se hicieron realidad. Hijo de diplomáticos, el artista visual Miguel Rio Branco se inspira en su infancia itinerante para realizar este retrato urbano abrasador que revela la soledad y las luchas cotidianas de los habitantes de las grandes metrópolis de todo el mundo.

Las imágenes son técnicamente impecables, pero lo que muestran no siempre es hermoso. Rio Branco no está interesado en documentar los puntos de referencia históricos de las ciudades, en componer un paisaje urbano impresionante o plasmar un ideal. Todo lo contrario: dirige su cámara hacia aquellos que sufren el rechazo y han quedado al margen, que han sido descartados y viven en el desencanto. Ya sea a través de imágenes crudas o serenas, son las personas sin hogar, los mendigos y las prostitutas, así como los perros callejeros, los coches desvencijados y los cristales rotos los motivos de sus impresiones urbanas.

Aunque algunos detalles sutiles revelan el lugar concreto en que se tomaron las fotografías, el corazón del proyecto de Rio Branco es la experiencia urbana común. En lugar de abordar el contexto local o proponer una narración explicativa, las imágenes están meticulosamente organizadas en una sola secuencia que hace pensar en una ciudad universal. Por su ritmo y orden de sucesión gráfica, esta colección parece salir de una sala de montaje en la que Rio Branco haya creado evocadores patrones de motivos, como edificios ruinosos, figuras solitarias, coches destartalados; de color, con rojos intensos, rosas polvorientos, blancos y azules claros; y de forma, como la imagen de un sin hogar que duerme en la calle junto a la estatua de un santo extático. Y de principio a fin, a modo de consuelo sensual y esperanzador en medio de la miseria y la suciedad, se presentan esporádicas imágenes de mujeres, desde imponentes retratos a delicados desnudos en primer plano.

Tan incisivo en el fondo como lírico en la forma, Maldicidade muestra el ineludible magnetismo de la ciudad así como su inhumanidad y carácter alienante. Descarnada, despojada de cualquier artificio y dolorosamente bella, esta es una colección en la que todos los habitantes de las grandes ciudades encontrarán algo de sí mismos o algo de lo que anhelan escapar.

La escritura encierra una especie de magia que nos transporta a momentos cruciales de la historia, la creatividad y la vida cotidiana, y nos vincula íntimamente con sus protagonistas. Durante casi medio siglo, el escritor y editor brasileño Pedro Corrêa do Lago ha reunido miles de cartas, manuscritos, composiciones musicales, fotografías con anotaciones y dibujos, entre otros, en una de las colecciones de documentos escritos a mano más completas de nuestro tiempo.

Desde un pergamino de 1153 con la rúbrica de cuatro papas medievales hasta la firma de Stephen Hawking en 2006, compuesta por una impresión de la huella de su pulgar, los elementos que aquí se recogen abarcan casi 900 años de historia, y nos acercan a escritores, artistas, compositores, figuras políticas, intérpretes, exploradores, científicos, filósofos y revolucionarios cuyas acciones y creaciones los convirtieron en leyendas.

En lugar de centrarse en un solo tema o una única época, Corrêa do Lago tomó la ambiciosa decisión de buscar documentos autógrafos importantes pertenecientes a ocho grandes áreas: arte, historia, literatura, ciencia, música, filosofía, exploración y entretenimiento. Los 140 extraordinarios documentos seleccionados para este libro, exhibidos por primera vez en una importante exposición en la Morgan Library and Museum de Nueva York, incluyen cartas de Lucrecia Borgia, Vincent van Gogh y Emily Dickinson, bocetos con anotaciones de Miguel Ángel, Jean Cocteau y Charlie Chaplin, y manuscritos de Giacomo Puccini, Jorge Luis Borges y Marcel Proust.

La escritura a mano es uno de los medios más viscerales con los que dejamos huella de nuestra existencia. En un momento en que gran parte de nuestra comunicación se ha vuelto completamente inmaterial, esta colección llama la atención sobre la capacidad de los textos manuscritos para revelar la energía, el poder, la vulnerabilidad y la imaginación de la humanidad a través del tiempo.

Uno de los principales artistas del simbolismo, Odilon Redon (1840-1916) fue también un pintor de extremos escénicos y emocionales. Hasta 1890 aproximadamente, el artista era conocido en exclusiva por sus obras en blanco y negro. Estos cuadros negros eran litografías y dibujos al carboncillo poblados por criaturas fantásticas y aterradoras en una paleta de colores lúgubres. Los tonos pastel, sin embargo, fueron abriéndose paso poco a poco por su obra y, con ellos, surgieron temas nuevos y menos sombríos. Las flores se convirtieron en un motivo recurrente. Donde otrora se alzaron símbolos de melancolía, ahora se abrían paso caballos y mariposas de alas batientes.

Si bien este lirismo y armonía de la última etapa de Redon contrasta vivamente con su melancolía anterior, sus principios rectores seguían «poniendo lo visible al servicio de lo invisible». Mediante una imaginería onírica, unas texturas suntuosas y un sugestivo uso del color, Redon buscó crear un equivalente pictórico de su propio espíritu. Fue sobre todo un artista que plasmaba estados de ánimo, tanto los malos presagios como la alegría, y que ejerció una considerable influencia en el posimpresionismo que vendría después.

Zen, relajantes, místicos, meditativos: las palabras no pueden hacer justicia a los interiores más hermosos de Asia. Ya sea un dorado monasterio tibetano, una plantación en Sri Lanka o una casa de campo en Tailandia, cada uno de los paraísos que aparece en este libro es extraordinario tanto por su estética como por su espíritu.

Esta colección presenta 46 escenarios excepcionales de Tíbet, Nepal, India, Sri Lanka, Birmania, Tailandia, Laos, Camboya, Singapur y Malasia. Entre las obras destacadas se cuentan casas tradicionales birmanas; el espectacular palacio Shiv Niwas en India, que recibió la visita de James Bond en Octopussy; templos camboyanos; una barcaza para el transporte de arroz convertida en casa flotante en Tailandia; un apartamento a gran altura con vistas al perfil urbano de Singapur; la “Mansión Azul”, la magnífica casa con patio pintada de color índigo que aparece en la película Indochina; un impresionante jardín diseñado por el arquitecto cingalés Geoffrey Bawa; y muchas, muchas más.

Películas como Perdición, El beso mortal o El sueño eterno nos introducen en un mundo de oscura e inquietante elegancia con este manual esencial sobre cine negro. Detectives privados y crímenes perfectos, policías corruptos y romances abocados al fracaso. Los editores Paul Duncan y Jürgen Müller examinan los temas clave del género negro y sus películas más representativas desde 1940 hasta 1960.

Este libro, profusamente ilustrado con fotografías fijas, fotogramas y carteles originales, ofrece, página tras página, composiciones visuales llenas de virtuosismo al tiempo que explora los paradigmas narrativos de este género inquietante, absorbente y en constante evolución. Y por si su apetito cinéfilo no se viera del todo satisfecho, el volumen concluye además la selección de TASCHEN de los 50 mejores clásicos del cine negro.

Repleto de damas enigmáticas, gángsteres desesperados y asesinos psicópatas que han proyectado una alargada y fascinante sombra sobre el cine, este es un manual imprescindible tanto para los aficionados al género negro como para los néofitos.