www.paquebote.com > -
Este primer libro de la Doctora Susana Castillo Ramos-Bossini, dedicado a la responsabilidad administrativa de los cargos públicos, contribuye a mejorar la calidad democrática en nuestro país. La profesora de la Universidad de Granada demuestra con sus páginas un compromiso institucional convencido, así como capacidades investigadoras sobresalientes en Derecho administrativo. El futuro de nuestra disciplina se muestra prometedor gracias a tales actitudes.
El bestseller de psicología coreano que ha unido a dos generaciones
Hay muchas cosas que he aprendido en estos cuarenta años como psiquiatra que nunca he compartido con mi querida hija.
Tras enterarse de que su hija va a casarse y establecerse en Estados Unidos, una reconocida terapeuta se da cuenta de que nunca ha podido ayudarla como le gustaría. La distancia le hace ver que hay muchas cosas que no ha podido decirle y decide enmendarlo a través de una serie de cartas.
En ellas, la autora combina su experiencia profesional, sus vicisitudes como madre trabajadora y las historias de sus propios pacientes para ofrecer píldoras de sabiduría sobre el complicado arte de sobrevivir a la vida adulta.
Con títulos como «Nadie te ha pedido que seas Superwoman», «Lo que ocurre cuando no te cuidas a ti misma», «La soledad en el matrimonio» o «Cómo tener menos remordimientos al final de tu vida», los textos de la doctora Han atraviesan las grandes cuestiones de la psicología contemporánea con la proximidad de una conversación familiar. Del trabajo al amor, pasando por el reconocimiento, la depresión, el paso del tiempo o las relaciones familiares, estas cartas no solo van dirigidas a la hija de la autora, sino a todas aquellas personas que agradecen un buen consejo.
PREMIO DAGGER DE NOVELA NEGRA
¿Puede ser una coincidencia que una muchacha muera a latigazos donde acaba de caer una bomba? ¿Puede jugarse una partida de ajedrez usando como escenario una ciudad sitiada?
El asedio es la novela más enigmática de Arturo Pérez-Reverte
Cádiz, 1811. España lucha por su independencia mientras América lo hace por la suya. En las calles de la ciudad más liberal de Europa se libran batallas de otra índole. Mujeres jóvenes aparecen desolladas a latigazos. En cada lugar, antes
del hallazgo del cadáver, ha caído una bomba francesa. Eso traza sobre la ciudad un mapa superpuesto y siniestro: un complejo tablero de ajedrez donde la mano de un jugador oculto -un asesino despiadado, el azar, las curvas de artillería, la dirección de los vientos, el cálculo de probabilidades- mueve piezas que deciden el destino de los protagonistas: un policía corrupto y brutal, la heredera de una importante casa comercial gaditana, un capitán corsario de pocos escrúpulos, un taxidermista misántropo y espía, un enternecedor guerrillero de las salinas y un excéntrico artillero a quien las guerras importan menos que resolver el problema técnico del corto alcance de sus obuses.
El asedio narra el pulso asombroso de un mundo que pudo ser y no fue. El fin de una época y unos personajes condenados por la Historia, sentenciados a un vida que, como la ciudad que los alberga -una Cádiz equívoca, enigmática, solo en apariencia luminosa y blanca-, nunca volverá a ser la misma.
El 10 de agosto de 1932, poco más de un año después del exilio del rey Alfonso XIII, se produjo un intento de golpe de Estado contra el Gobierno de la República, el que ha pasado a la historia de España con el nombre de «La Sanjurjada», dado que fue el teniente general José Sanjurjo Sacanell, uno de los implicados en el referido levantamiento militar. Tras el estudio e investigación en los archivos de otro teniente general, en este caso Emilio Barrera Luyando, el autor saca a la luz documentos hasta ahora inéditos, que acreditan no sólo el hecho de que fue Barrera el único director de ese golpe de Estado antirrepublicano, sino cómo ocurrió la preparación y el fracaso del mismo. También en este trabajo y en base a los archivos del general Barrera, se descubre cómo fueron los preparativos de otro golpe de Estado, en este caso contra la República y el que ha pasado a la historia de España como «el 18 de julio de 1936». El general Barrera, quiso revelar cómo fue el levantamiento del 10 de agosto de 1932 a través de sus memorias, pero no pudo llevarlas a cabo, al fallecer poco tiempo después de la guerra civil española. El autor aporta datos y documentos en este trabajo, que con seguridad, hubiesen sido puestos de manifiesto por Barrera en sus memorias.
«Una obra que fluye y que se estructura en torno a la interesante y desconocida biografía del general Emilio Barrera Luyando, protagonista de primer orden y testigo privilegiado de aquellos sucesos. La vida de oficial de alto rango que gozó de la confianza del rey y que García-Bernal ha querido reivindicar y honrar con generosidad y con aliento para la posteridad». Ricardo Mateos Sainz de Medrano
Ensayo que desvela cómo fue el intento de golpe de Estado conocido como «La Sanjurjada» y contado por el único director de dicho golpe, el teniente general Barrera Luyando.
Javier García-Bernal Cuesta. Nacido en Madrid, es licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid, máster en Práctica Jurídica, máster en Historia Contemporánea y académico de número de la Academia Costarricense de Ciencias Genealógicas. Abogado en ejercicio del Ilustre Colegio de Madrid, cónsul honorario de Costa Rica en Madrid (1993-2023), miembro de mérito de la Fundación Carlos III y académico correspondiente de la Academia de la Diplomacia del Reino de España. Está en posesión de la Gran Cruz de la Orden Nacional Juan Mora Fernández de Costa Rica, cruz de Oficial de la Orden de Isabel la Católica, cruz de Oficial de la Orden del Mérito Civil y cruz al Mérito de la Guardia Civil. Especializado en el periodo de la transición de Monarquía a la II República en España, es autor de los libros Reflexiones sobre Alfonso XIII (2017), el Exilio de Don Alfonso XIII (2018), y Alfonso XIII y el 10 de agosto de 1932 (2020).
Emilio Barrera Luyando (Burgos, 1869-1943). Se incorporó como alumno de infantería a la Academia Militar de Toledo en 1885. Obtuvo el grado de alférez personal en 1888 y el de teniente en 1981. Los grados de capitán y de comandante los adquirió por antigüedad estando destinado en Cuba y Puerto Rico. Destinado en Melilla, ascendió a coronel en 1912 y en esa plaza, ya en 1916, fue ascendido al grado de general de brigada, y en 1922 al de general división. Al generalato, ascendió por méritos de guerra y siendo general de división fue nombrado comandante general de Larache. En el ámbito político, en 1922, fue nombrado subsecretario del Ministerio de la Guerra y en 1924, ascendió al grado de teniente general, siendo nombrado Capitán General de Cataluña y posteriormente, en esa condición militar, en 1927, fue designado miembro de la Asamblea nacional de España, y entre 1931 y 1939, fue consejero de Estado.