"En el libro de Azucena Pedraz Marcos... tenemos una ágil y bien documentada descripción de lo que fue un momento (unos años) de ciencia en España, en torno a la Geografía y a las Sociedades que a su conjuro se crearon, y que concentraron, como nunca antes, el afán de conocimiento, el impulso a la expansión civilizadora y al colonialismo, que todavía quería ser civilizado: lo mismo que en aquel tiempo estaban haciendo otras naciones de Europa" (Alberto Gil Novales).

1ª edición.

Se ofrecen los resultados de investigaciones que ayudan a elaborar y comprender tanto la historia religiosa y general de la Córdoba bajomedieval, como las de Andalucía bética e incluso, en buena medida, las de la Corona de Castilla de este período, cuando se sientan las bases de la Andalucía actual. El establecimiento de la red parroquial urbana y rural permite una aproximación certera a la organización territorial y a la jerarquización de los núcleos de población de este obispado.

La tardía ocupación de Filipinas hizo que la formulación legal de la encomienda en este archipiélago no se pareciese a la que años atrás se introdujo en el Nuevo Mundo. Además su implantación en las islas del Poniente casi viene a coincidir con la promulgación de las Ordenanzas de 1573, en las que finalmente se institucionaliza la encomienda como mera cesión de tributos. La construcción de una sociedad colonial en el Extremo Oriente era una tarea de tal magnitud que implicaba una gran demanda laboral, y se impuso en las nuevas tierras el trabajo obligatorio para los naturales.

Se reúnen un buen número de 'estados de la cuestión' cuya lectura conjunta denota que nos hallamos en una fase inicial de la investigación, muy centrada en la identificación de los elementos espaciales, aspectos monumentales y áreas funcionales urbanas. Este primer estadio de construcción de una topografía histórica de las ciudades es fundamental, ya que constituye la base sobre la que comenzar a edificar la estructura del urbanismo medieval.