«Copenhague, febrero de 1996. Dos hermanos adolescentes están enmanillados en una pequeña cabaña a la orilla del mar. Al borde de la desesperación, el mayor logra escribir un mensaje con su propia sangre y lo introduce en una botella que tira al agua. Años más tarde, esta botella llega al Departamento Q, pero Carl Mørck tiene otros problemas por los que preocuparse. Sin embargo, el extraño objeto despierta un interés especial en su colaborador Assad. Aunque a primera vista es un mensaje ilegible, consiguen descifrarlo. Entonces se dan cuenta de que están ante un caso muy peculiar: el mensaje es la llamada de auxilio de Paul Holt, secuestrado años atrás junto con su hermano, una desaparición que nunca fue denunciada por su familia. Mientras tanto, un hombre misterioso que se hace llamar Chaplin elige en secreto el próximo objetivo de su lucrativo negocio: el secuestro y asesinato de niños. Los elegidos son siempre miembros de grupos religiosos y su intención ahora es acercarse a la familia de Rachel y Joshua. Cuando Carl viaja a Suecia para visitar a la familia Holt, miembros de los testigos de Jehová, descubre que hace años, un hombre había secuestrado a sus dos hijos a cambio de una gran cantidad de dinero, pero al entregar el dinero, solo liberó al pequeño. ¿Por qué nunca liberó a Paul? ¿Y por qué su familia nunca denunció su desaparición? Carl enseguida intuye que su caso no es el único y que el perturbado podría seguir actuando con total impunidad.»