En esos momentos en que lo más importante decir las palabras adecuadas es cuando nos encontramos sin palabras. Esta obra marca una diferencia fundamental con respecto a otras de su género: da más importancia al lado emocional que al aspecto formal de la comunicación haciendo que sea más rápido y fácil superar el vacío que hay entre lo que sentimos y lo que decimos. Ofrece consejos prácticos y modelos de conversaciones, cartas, y correo electrónico para ayudar al lector a escribir y hablar con convicción, sinceramente y con compasión a aquellos que realmente le importan: a la familia, a los amigos, a su amor, a su pareja, a su jefe, a sus empleados y a sus compañeros de trabajo. Si quiere animar a un amigo en apuros, concertar una cita, confortar a un compañero de trabajo que está pasando un mal momento, o decirle a alguien cuánto le importa, hallará en este libro todas las palabras que necesita para expresar sus sentimientos de la mejor manera. Su útil lista de palabras y frases que utilizar y que evitar, y sus consejos sobre cómo utilizar efectivamente el lenguaje corporal, le ayudarán a comunicar su mensaje con todo el cariño y atención que siente. Encontrará una serie de modelos y guías fáciles de usar sobre temas difíciles de comentar, incluidos: - Dar las gracias y demostrar aprecio. - Ofrecer simpatía y condolencias. - Hacer crítica constructiva y estimulante. - Motivara sus empleados a trabajar más duramente. - Hablar con sus hijos sobre la muerte, el divorcio, las drogas y el sexo. Jack Griffin es un prolífico autor de más de doce libros sobre la comunicación, los negocios y la gestión empresarial

Ciencia Política-Semilla y Surco-Serie de Ciencia Política.

Este texto es el resultado de la experiencia docente del autor con estudiantes de preparatorio de Medicina y otros principiantes en Harvard y en la Universidad de California (Berkeley), unida a las modificaciones de las técnicas de enseñanza adecuadas a la unidad del currículum en el New College. Aunque este libro está concebido para principiantes, nos hemos esforzado más, en ofrecer el raciocinio mecanístico y sintético de la Química orgánica, que en describir simplemente el material químico que la compone.