Cuando los campeones de Gotham City y Mega-City Uno se encuentran cara a cara... ¿Quién es la ley?
La suma de Gotham y Mega-City Uno debería ser lo bastante grande para los dos... ¡pero Batman y el Juez Dredd chocarán igual! ¿Qué otra cosa podría esperarse de un justiciero urbano vestido de murciélago y de un implacable e ultraviolento agente de la ley del futuro? Lo relatan con todo detalle John Wagner y Alan Grant, que no solo firman las cuatro aventuras conjuntas de ambos personajes, sino una adicional en la que Dredd se cruza con Lobo... y, como era de esperar, ninguno se anda con miramientos.
A Grant y Wagner ?cocreador de Dredd? se les unen aquí Simon Bisley (Hellblazer: Peter Milligan), Glenn Fabry (Neverwhere) y dos habituales de Lobo, Val Semeiks y Cam Kennedy, entre otros.

Las calles de Mega-City Uno están llenas de peligros, ya sean feroces caimanes gigantes o delincuentes enloquecidos con intención de asesinar. En esta metrópoli infestada por el crimen, el orden lo mantienen los Jueces, firmes guardianes de la paz con el poder de ser a un mismo tiempo juez, jurado y verdugo. El más temible de todos ellos es el Juez Dredd, y estos son sus casos más importantes. Este grueso tomo repleto de emociones incluye clásicos como «El Ángel de Dredd», «La Brigada Wally» y «La ciudad de los malditos». Escrito por las leyendas del cómic John Wagner (Una historia de violencia) y Alan Grant (Batman), este volumen cuenta con los dibujos de Steve Dillon (Predicador), Ian Gibson (La balada de Halo Jones) y Cliff Robinson.

Kenneth Corman, de 12 años, enterró a su padre maltratador en el jardín de su vieja casa familiar. La cosa que le había matado estaba dentro, acechando en la oscuridad de una habitación cerrada.
Durante toda su corta vida, Kenneth había tenido la fuerte sensación de que había algo horrible morando en esa casa llena de secretos. Pero tenía que saber lo que había allí arriba. Tenía que saber qué había matado a su padre. Había llegado la hora de enfrentarse al horror que había tras esa puerta...
Creada conjuntamente por Alan Moore (Watchmen) y Heinzl (Doomlord), con historias adicionales de John Wagner (Button Man), Alan Grant (Batman) y Jesús Redondo (Return to Armageddon), esta terrorífica historia surgida de las páginas de Scream! queda recopilada, en su totalidad y por primera vez, en este tomo.

¡Iniciamos la recuperación de la etapa de Norm Breyfogle!
Todo empieza en este imprescindible tomo de Grandes autores de Batman, que incluye, entre otros hitos, las primeras apariciones de villanos tan míticos como el Ratonero, Cornelius Stirk o el Ventrílocuo y Scarface.
Entre los años ochenta y los noventa, si hubo un dibujante capaz de definir a Batman para su época —como en otras Sprang o Adams—, ese fue Norm Breyfogle. Con solo 10 años ya pensaba en disfrazarse de murciélago para hacer justicia, y no mucho después DC, tras convocar un concurso para aficionados, publicaba un dibujo suyo de Robin. Su sueño de ocuparse de Batman como profesional se hizo realidad en el núm. 579 de Detective Comics (octubre de 1987)... y el resto es historia.

Una accidentada visita al barbero, la participación en un concurso atroz, el encargo de asesinar a un dios… Lobo sigue metiéndose en problemas —cada cual más delirante— en el presente tomo, que recopila el especial Lobo in the chair y las series limitadas Lobo: Gladiadores antiamericanos y Lobo: A contract on gawd.

Batman: vigilante y protector de Gotham City. El Juez Dredd: policía, juez, jurado y verdugo de Mega-City Uno. Poseedores de nociones de justicia y modus operandi difícilmente compatibles, ¿qué sucederá cuando sus caminos se crucen? Alan Grant y John Wagner se encargan de responder a este interrogante, acompañados por un elenco de dibujantes encabezado por Simon Bisley.
Primer volumen (de dos) de una antología destinada a recopilar los encuentros entre ambos personajes, el presente tomo contiene los especiales Judgment on Gotham, Vendetta in Gotham y The Ultimate Riddle. Cómics, todos ellos, que ponen de manifiesto el carisma de dos iconos de la historieta norteamericana y británica.

Megacity Uno es la gigantesca metrópolis llena de criminales que ocupa por completo la costa oeste de norteamérica en el siglo XXII, donde el orden solo se mantiene gracias a los agentes de la ley del futuro: ¡los jueces! Juez Dredd, el mejor agente de Megacity Uno, ha estado imponiendo la ley y el orden con su puño de acero durante más de tres décadas desde la revista británica 2000 AD. Ahora, este legendario personaje regresa con nuevas aventuras a lo largo de la Tierra Maldita, un enorme páramo radiactivo, hacia la infectada Megacity Dos. En este volumen termina la primera epopeya de “Dredd, La Tierra Maldita” y comienza “El día que murió la Ley”, escrita por John Howard, con la colaboración del dibujo de Mike McMahon (ABC Warriors), Brian Bolland (Batman: The Killing Joke) y Brett Ewins (Skreemer). Tras haber cumplido su desesperada misión en Megacity Dos, el Juez Dredd regresa a la costa oeste esperando un recibimiento digno de un héroe. Al llegar allí, Dredd será acusado de asesinato. ¿Quién tiene interés en apartar al Juez de su camino?

ARGUMENTO La guerra nuclear de 2150 ha devastado Gran Bretaña. La mayoría ha logrado retomar sus vidas, pero para las víctimas del estroncio 90 todo ha cambiado. Convertidos en mutantes y rechazados por la sociedad, solo les queda un camino: trabajar de cazarrecompensas. Estos agentes de Seguir y Destruir se dedican a detener a los más peligrosos criminales de la galaxia. Uno de esos agentes Strontium Dog es Johny Alfa, cuyos ojos emiten rayos alfa que le permiten ver a través de objetos sólidos así como el interior de la mente humana.

Las máquinas de matar más desarrolladas, los aliens, destruyen todo lo que encuentran a su paso y dejan una carnicería a la velocidad de la luz. ¡No conocen la piedad… las medias tintas… ni la ley! Cuando un alien sale a la superfi cie de la Mega-City Uno, los jueces no pierden un segundo en intentar atraparlo o acabar con él. Pero bajo la ciudad está oculto un secreto abrumador, ¡de tal calibre que puede que el Departamento de Justicia no pueda gestionarlo!