Una edició gran i de cartró del clàssic il·lustrat, ideal per explicar en veu alta y compartir.

?De què fa gust la lluna?? és, sense cap mena de dubtes, una de les publicacions més emblemàtiques del catàleg de Kalandraka. Des de la seva publicació en 1999, més de 500.000 exemplars d?aquest relat de solidaritat i somnis compartits han viatjat a llars, escoles o biblioteques en els diferents idiomes
editats: català, castellà, gallec, eusquera, portuguès, anglès, italià... 

Kalandraka ens acosta en llengua catalana aquest clàssic contemporani en un nou format en cartoné i mida excepcional ideal per explicar en públic, que es convertirà en un recurs imprescindible per a mediadores, escoles i biblioteques. 

?De què fa gust la lluna??, escrit i il·lustrat per l?autor il·lustrador polonès Michael Grejniec, és un llibre especialment recomanat per a primers lectors. Basa la seva estructura en les repeticions i l?acumulació de personatges, un recurs molt freqüent en la literatura tradicional. Aquesta obra convida a ser explicada, aconseguint una gran interacció entre el narrador i els receptors.

Unha edición grande e acartonada do clásico ilustrado, agora en galego, ideal para contar e compartir. 

?A que sabe a lúa?? é, sen lugar a dúbidas, unha das publicacións máis emblemáticas do catálogo de Kalandraka. Desde a súa publicación en 1999, máis de 500.000 exemplares deste relato de solidariedade e soños compartidos teñen viaxado a fogares, escolas ou bibliotecas nos diferentes idiomas nos que foi editado: galego, castelán, català, euskara, portugués, inglés, italiano... Kalandraka achéganos agora en lingua galega este clásico contemporáneo nun novo formato en cartoné e tamaño excepcional, ideal para ler en grupo e que de certo se converterá nun recurso imprescindible para mediadoras, escolas e bibliotecas. 

?A que sabe a lúa??, escrito e ilustrado polo autor e ilustrador polaco Michael Grejniec, é un libro especialmente recomendado para primeiros lectores. Basea a súa estrutura nas repeticións e na acumulación de personaxes, un recurso moi frecuente na literatura de tradición oral. Esta obra convida a ser contada, conseguindo unha grande interacción entre o narrador e os receptores.

Los animales pensaban: «¿A qué sabe la luna?». Por las noches, miraban al cielo. Se estiraban mucho, mucho, mucho, alargando el cuello y las patas. Pero no podían alcanzarla. Un día, la pequeña tortuga subió a la montaña más alta para poder llegar a la luna? «¿A qué sabe la luna?» es la primera obra de autor en incorporarse a la colección De fácil lectura - Makakiños, que reúne adaptaciones de cuentos tradicionales adecuados al sistema de pictogramas, junto con los títulos de la serie Día a día, formada por guías de apoyo que facilitan la autonomía y la intercomunicación con el entorno. Esta iniciativa pionera impulsada desde la Asociación Autismo BATA y KALANDRAKA permite acercar la lectura a personas en el espectro del autismo, ayudando a romper las barreras de la comunicación y haciendo comprensible el mundo de la fantasía a muchas niñas y niños. Este álbum de Michael Grejniec se ha ajustado para que la lectura sea accesible, restando abstracción al lenguaje. Además del texto y las ilustraciones, la lectura se apoya en el sistema SPC (Símbolos Pictográficos de Comunicación) creado en Estados Unidos por Roxanna Mayer-Johnson a base de dibujos y colores. Esta colección también se utiliza en Educación Infantil como material de apoyo para un primer acercamiento a los libros por parte de las prelectoras y los prelectores. Las ilustraciones, realizadas en papel-couché, destacan por su estilo sencillo y cálido. La distribución de las imágenes y del texto, sobre fondo blanco, consigue un equilibrio que potencia el efecto artístico del libro.

Chi non ha mai sognato di dare un morso alla Luna? Gli animali del racconto condividevano questo stesso desiderio: avrebbero voluto assaggiarne soltanto un pezzetto, ma tutti i loro tentativi di allun-garsi verso il cielo fallivano. La tartaruga, allora, ebbe un?idea geniale: ?Se mi sali sulla schiena, saremo abbastanza alti da toccare la luna?, disse all?elefante

?¿A qué sabe la luna?? es, sin lugar a dudas, una de las publicaciones más emblemáticas del catálogo de Kalandraka. Desde su publicación en 1999, más de 500.000 ejemplares de este relato de solidaridad y sueños compartido han viajado a hogares, escuelas o bibliotecas en los diferentes idiomas editados: castellano, galego, català, euskara, portugués, inglés, italiano,... Para celebrar los 25 años de Kalandraka, la editorial ofrece este clásico contemporáneo en un nuevo formato en cartoné y tamaño excepcional ideal para mostrar en público que se convertirá en un recurso imprescindible para mediadoras, escuelas y bibliotecas. ?¿A que sabe la luna??, escrito e ilustrado por el autor e ilustrador polaco Michael Grejniec, es un libro especialmente recomendado para primeros lectores. Basa su estructura en las repeticiones y la acumulación de personajes, un recurso muy frecuente en la literatura tradicional. Esta obra invita a ser contada, consiguiendo una gran interacción entre el narrador y los receptores. Desde el punto de vista estético, las ilustraciones destacan por su estilo sencillo y cálido, a lo que contribuye el soporte en el que están realizadas, en papel-couché. La distribución de las imágenes y del texto, sobre fondo blanco, consigue un equilibrio que potencia el efecto artístico del libro.

Había moito tempo que os animais andaban a matinar a que sabía a lúa. Era doce ou salgada? Só querían probar un anaco pequeno. Polas noites, miraban ansiosos para o ceo. Estarricábanse e estiraban o pescozo, as pernas e os brazos, tentando collela... Quen non soñou algunha vez con darlle unha dentada á lúa? Este foi precisamente o desexo dos animais deste conto. Tan só querían probar un anaquiño pero, por máis que se estiraban, non eran quen de tocala. Daquela, a tartaruga tivo unha idea xenial: ?Se sobes ao meu lombo, poida que cheguemos onda ela?, díxolle ao elefante

Hacía mucho tiempo que los animales deseaban averiguar a qué sabía la luna. ¿Sería dulce o salada? Tan solo querían probar un pedacito. Por las noches, miraban ansiosos hacia el cielo. Se estiraban e intentaban cogerla, alargando el cuello, las piernas y los brazos. ¿Quién no soñó alguna vez con darle un mordisco a la luna? Este fue precisamente el deseo de los animales de este cuento. Tan solo querían probar un pedacito pero, por más que se estiraban, no eran capaces de tocarla. Entonces, la tortuga tuvo una genial idea: ?Si te subes a mi espalda, tal vez lleguemos a la luna?, le dijo al elefante.