Este libro nace del goteo dominical de preparar la homilía. No es libro laboratorio. Surgió después de ser vivido en la comunidad cristiana. En la introducción, el autor nos cuenta la génesis. Las páginas web hoy proporcionan muchos materiales homiléticos, y sin embargo, los fieles prefieren la homilía y la oración del presidente de la Eucaristía que conocen. Unir la palabra pronunciada a la persona, a su vida conocida, a su forma de celebrar da calor y color especial del evangelio dominical. La originalidad de las homilías aquí recogidas para todo el Ciclo B radica en que de ellas brota una oración. No se trata solo de conocer y de entender el Evangelio, sino de rezar con el Evangelio. Un saber de Dios que no se hace oración a Dios se queda siempre pobre. El evangelio del domingo nos transmite a la vez revelación de Dios y nos invita a relacionarnos con Dios por medio de la oración.

Los libros no se dicen, se leen; este, además, se reza. He aquí un pequeño manual de reflexión y oración, pensado para quien se acerca a la Palabra de Dios, los domingos y fiestas, con un corazón inquieto. Se presenta como guía para la meditación, pero sobre todo como una oportunidad de rezar lo que uno piensa. Dicho de otra manera, aquí se hallará un doble acceso a la Palabra: desde la mente y desde los sentimientos. Este libro está hecho para ser leído más de rodillas que sentado.
Libros hay que brotan a borbotones; hay otros que nacen lentamente, como copos de nieve. Necesitan ser rodados por la vida, por la experiencia, por el trabajo; surgen de la insignificancia, de una intuición, de un momento inesperado pero real. «Este libro pertenece a ese grupo: semana tras semana, folio a folio, apareció en un estante de mi vida personal, casi sin yo pensarlo», dice el autor. El libro nace de la experiencia de quienes, domingo a domingo, han compartido Predicación y oración.

Antes de ser un libro escrito para ser publicado ha sido un material de reflexión y de oración de varias comunidades cristianas, como nos dice el autor en la introducción. Ha sido una propuesta a las inquietudes que la liturgia de cada domingo suscitaba en mí. En determinados momentos algunos autores clásicos y actuales están de fondo. Es lo bonito: la fe se comparte y compartiéndola, todos nos hacemos autores y todos deudores de los demás creyentes.

Diversos estilos de oración para comenzar en los colegios la jornada con una plegaria.

Experiencias pascuales en ambientes juveniles.

Experiencias pascuales en ambientes juveniles