978-84-9023-146-3
Celebraciones para los domingos de Cuaresma. Ciclo A
JUAN JAUREGUI CASTELO
Editorial: CCS Año: 2014 Páginas: 168Formato: Rústica, 21 x 15 cm.
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La Semana Santa y el Tiempo Pascual concentran muchos esfuerzos pastorales en las comunidades cristianas, a pesar de las amenazas de los desplazamientos vacacionales. Este libro es una referencia de lo que se puede hacer tanto en las comunidades con presencia de presbíteros como en aquellas que no disponen de la posibilidad de un presbítero en la celebración dominical. A estas comunidades les queda siempre lo esencial: la reunión, la proclamación y escucha de la Palabra, la oración y la animación fraterna para ser testigos del Resucitado en la vida ordinaria. El autor ofrece sugerencias con posibilidad de elección de homilías, gestos, peticiones… Una riqueza que exige a los encargados de la celebración preparar y elegir lo que es más apropiado para la asamblea concreta que presiden.
Ponemos en manos de los responsables de la animación litúrgica de nuestras comunidades un material completo para Los domingos del Tiempo Ordinario. Ciclo C. La finalidad es enriquecer el servicio pastoral de la celebración dominical, en el que cada vez están más presentes los seglares animando las reuniones de la comunidad reunida en domingo con ausencia de presbítero.
Preparar la celebración dominical es el reto continuado y profundo de los presbíteros y de los equipos que animan la «reunión cristiana en ausencia de presbítero». Hace falta un arte especial para lograr que lo que está escrito en un papel llegue a ser celebración viva, un encuentro de la comunidad cristiana con su Señor Resucitado. Las malas celebraciones ahuyentan de la celebración. No vale decir que hay «mucho material colgado en la red». A los materiales hay que llenarlos de vida y actualidad. Este material ha servido para «vivir la celebración dominical». Y servirá si al usarlo los responsables ponen vida. No vale leer lo escrito, sino actualizar lo escrito. Todo, para que la comunidad se pueda encontrar con su Señor, con su Palabra, con su gracia comunicada.
La liturgia nos habla de la Cuaresma como de un «tiempo favorable», un tiempo de bendición y de gracia, un tiempo de conversión. La celebración eucarística dominical es el corazón de la Cuaresma. Las lecturas de los domingos dan color a la semana y orientan la reflexión, la oración y la catequesis cuaresmal. Estas celebraciones dominicales aquí recogidas han nacido en el calor de una comunidad parroquialrural, fuertemente preocupada por celebrar bien, y pueden servir de guía para otras comunidades, para comunidades que no tienen oportunidad de celebración eucarística por falta de presbítero.