978-84-10-03126-5
BUZ SAWYER 1947 1948
ROY CRANE
Editorial: DOLMEN EDICIONES Fecha de publicación: 01/02/2024 Páginas: 192Formato: Rústica
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Desde mi dentro es una reivindicación a la libertad y a la identidad propia de una chica corriente, algo sensible y solitaria que, en definitiva, solo trata de encontrar su lugar en el mundo. Un mundo lleno de convencionalismos y comportamientos ya establecidos, donde ella tratará de romper dichos moldes para definir su propia identidad y no aquella que creó para los demás. Con un diario, una cámara y los perros que van formando parte de su vida, creará «la lista» y, con ella, emprenderá la gran aventura que la llevará a mudarse a la República Checa. Un viaje desde el interior hasta fuera donde madurará, aprenderá a perdonarse y a querer todas aquellas cosas de sí misma que la hacen única.
Un clásico de la literatura norteamericana.
Un joven soldado se alista voluntariamente en el ejército de la Unión para combatir en la Guerra Civil Americana. Tiene sed de gloria y muchas ganas de demostrar su coraje, y un buen día, con grandes expectativas sobre la guerra, abandona la granja en la que siempre había trabajado junto a su madre. Ante la inminencia del combate, el soldado se debate entre las ansias por empezar a luchar y las dudas acerca de su valor.
Con esta novela el conflicto bélico queda despojado de toda solemnidad o romanticismo. La roja insignia del valor ofrece un retrato crudo de la guerra, que se nos aparece como un espectáculo temible, sórdido y delirante.
Esta novela es un conmovedor alegato feminista, sin que sin embargo se declare como texto feminista; una denuncia de los terribles efectos del alcoholismo para la vida de muchas mujeres, sin que explícitamente anuncie que lo quiere ser. Pero textos como el de Crane seguramente sean más convincentes, más efectivos, que las declaraciones altisonantes y los discursos moralizantes. La historia de Maggie que nos cuenta Stephen Crane es triste, despiadada, naturalista? De niña malvive entre padres alcohólicos, siempre violentos: violentos entre sí, violentos con los hermanos de Maggie, violentos con la pobre Maggie. Pero un día como cualquier otro el amor romántico ?el disfraz varonil con el que tantas veces se presenta la esperanza? llama un día a su puerta y ella se deja engatusar.
Desde entonces cada uno de sus propios pasos la encaminan a su desdicha final.
Este libro contiene la base para comprender las características clave, tanto teóricas como prácticas, de la MBCT. De lectura esencial ?y sumamente atractiva? para los profesionales y personas que se estén formando en este campo o para los noveles en el universo de la MBCT.
Rebecca Crane nos aporta una visión general sintética, directa y completamente actualizada de la MBCT. En perfecta sintonía con la práctica de la meditación mindfulness, nos invita a adoptar una nueva orientación ?caracterizada por la aceptación y la compasión? hacia nuestra experiencia interna a medida que esta se manifiesta. Este enfoque fomenta el reconocimiento de que incluso las dificultades son parte intrínseca de la vida y de que es posible trabajar con ellas de nuevas maneras.
Zander y Grover, un campamento de verano y una amistad que les unirá para siempre.
Según Zander Osborne, de dieciséis años, «ninguna parte» es un lugar real, y ella ya se encuentra bien allí. Sin embargo, sus padres insisten en que salga de ahí y también de su ciudad, para ir al Campamento Padua, especializado en chicos con problemas mentales. Zander no encaja, o al menos eso es lo que ella cree. Después de todo, basta una palabra para definir a sus compañeros de campamento: «locos». En realidad, todos los que están allí o lo están o falta poco para que les diagnostiquen algo: Cassie, por ejemplo, se describe a sí misma como anoréxica, bipolar y maníaco-depresiva. Luego está Grover Cleveland, que sí, es un muchacho encantador, pero se exalta enseguida y eso acabará por convertirlo en esquizofrénico uno de estos días. Y también está Bek, encantadora, pero mentirosa patológica. Pero entre las «terapias de grupo» y las salidas nocturnas a hurtadillas, según se van forjando amistades y el verano de Míchigan se intensifica, los cuatro adolescentes empezarán a revelar sus trágicos secretos. Zander se sentirá cada vez más atraída por los encantos de Grover? lo que hará que se plantee que, sí, quizá, algún día incluso pueda ser feliz. Pero eso solo lo logará si antes consigue conocerse a sí misma y reconstruir su propio yo.
-Por favor, tráeme una rosa-, le pide Bella a su padre al marchar. Pero la rosa que corta procede del jardín de un horrible monstruo, la Bestia, quien, a modo de castigo, le pide a cambio que permita que su hija viva con él. Bella acude por propia voluntad para salvar a su padre y, conforme va conociendo a la Bestia, consigue apreciar que, a pesar de mostrar un aspecto feo y terrorífico, posee una naturaleza de enorme bondad. Sin embargo, ¿podrá llegar a amarlo?
Las ilustraciones, los dibujos, patrones y diseños de este libro se inspiran en la obra de Walter Crane, cuya edición de La Bella y la Bestia se publicó en 1874.
A finales del siglo XIX en una sociedad capitalista, urbana e industrial donde solo importa el dinero y el ascenso social, el Bowery de Nueva York es un campo de batalla y los protagonistas de "La madre de George" (1896), la señora Kelcey y su hijo, víctimas de un medio implacable y sin escape que los desintegra física y moralmente.
Era de justicia que recuperáramos en el XXI la figura de Stephen Crane, considerado por sus contemporáneos “contrario a los más nobles principios de la ética”, y olvidado a lo largo del XX. Fue el “padre” del naturalismo norteamericano, un estilo que tiene en sus obras, "Maggie: una chica de la calle" (1893), "La roja insignia del valor" (1895) y "El bote abierto" (1898), algunas de las historias más hábiles de la literatura, casi dostoievskianas.
Amusing verses and bright full color pictures describe the sights and the people encountered by a family of Victorian children on its first journey abroad, to Northern France and Paris. Crane was born at Chester. In 1824, he went to London, and joined the Royal Academy schools. There he remained for two years, receiving, in 1825, a medal for drawings from the antique.