TEMAS DE HOY/HUMOR

Este libro convincente y polémico formula una tesis asombrosa: que muchas de las distorsiones y confusiones de la vida adulta tienen sus raíces en el miedo infantil a que nuestros padres nos maten y en la convicción de que nuestras vidas dependen de que ganemos su amor. En “Para que la bruja no me coma”, Dorothy Bloch se basa en veinticinco años de práctica psicoanalítica. Su libro es a la vez un resumen de su experiencia como terapeuta y una revelación de lo que ha aprendido acerca del funcionamiento interno de la mente humana.Dorothy Bloch cree que el miedo al infanticidio, que tiene su origen en la vulnerabilidad en nuestra primera infancia, se mezcla más tarde con el pensamiento mágico que nos lleva en la niñez a culparnos por cualquier hecho desgraciado que suceda en nuestro entorno y por tanto a anticiparnos al castigo. Para sentirse seguro, el niño recurre habitualmente al autoengaño y la fantasía como medidas defensivas. El terror y la rabia son desplazados hacia monstruos y otras criaturas imaginarias, preservando así la creencia (o esperanza) indispensable de que los padres son (o serán) cariñosos. Desgraciadamente, la fantasía de un yo devaluado que acompaña a la idealización de los padres no se desvanece por lo general en la niñez, sino que, desde su escondrijo en el inconsciente, causa a menudo estragos en Ia vida de los adultos. Las ramificaciones de este proceso pueden ser complejas y devastadoras, como pone de manifiesto la autora a través de sus conmovedores y dramáticos relatos de encuentros terapéuticos con niños y adultos. Como también demuestra Dorothy Bloch, el tratamiento psicoanalítico puede ser muy eficaz para resolver los problemas emocionales resultantes. Dorothy Bloch es psióloga diplomada y psicoanalista y ejerce privadamente en la ciudad de Nueva York. Durante los últimos veinticinco años ha tratado a pacientes de una edad comprendida entre los dos años y medio y los sesenta y ocho, y de este modo ha podido aprender muchas cosas de primera mano acerca de los orígenes y las funciones de las fantasías de la primera infancia y su posterior destino en el inconsciente de los adultos. También ha participado activamente en la formación de terapeutas en la National Psychlogical Association for Psychoanalysis, el Manhattan Center for Advanced Psychoanalytic Studies y su propio consultorio privado.

Un niño espera… hacerse mayor, un beso antes de ir a dormir, que esté listo el pastel. Las cosas simples de la infancia son los grandes tesoros. Cuando la vida pasa, lo que el niño espera, cambia. Cambian también los tesoros, pero la vida sigue adelante: a veces alegre, a veces triste, a veces en soledad, a veces en compañía.
Este precioso libro ilustrado acompaña la vida de un personaje desde la infancia hasta la edad adulta, y propone una interesante reflexión sobre muchas de esas cosas que con frecuencia olvidamos.
Un libro para todas las edades. Un regalo para siempre.

• ISBN: 9788478808625 / 8478808620
• Estado: Bueno.
• Subtítulo: «Si algo puede salir mal, saldrá mal... o la tostada siempre se cae por el lado de la mantequilla.»
• Traducción de Ana Mendoza.

Todo el mundo conoce la Ley de Murphy ("Si algo puede salir mal, saldrá mal"), pero es más improbable que haya oído alguna vez hablar de los cientos de enunciados "científicos" que recopila este libro. Lo que ha hecho Arthur Bloch es poner en orden todas las leyes con las que los burócratas, ejecutivos y científicos americanos han intentado describir, en clave de humor, las causas de que las cosas salgan mal. Aquí están, por ejemplo, el axioma de Cahn ("Cuando todo falle, lea las instrucciones"), la regla de Matz ("Una medicina es una sustancia que, cuando se inyecta a una rata, produce un informe científico"), la navaja de Hanlon ("No le atribuya nunca a la malicia lo que puede explicar la estupidez"), el problema de Kovac ("Cuando se equivoca al marcar, nunca está comunicando") o la ley de Rogers ("En cuanto la azafata sirve el café, el avión entra en zona de turbulencias"), que resulta trivial a la vista de la explicación de Davis de la ley de Rogers: "Servir café en un avión produce turbulencias".

71 pp.+1 h. 15x10,5. Rústica ilustrada. Ed. Escelicer. Madrid, 1969.

Colección Así es la vida, 4. Enc. en tapa dura ilustrada. 16x12. 45 pp. Edit. La Galera. Barcelona, 1998.
Lilí no siempre se lleva del todo bien con Max. ¿A quién no le cuesta compartirlo todo con un hermano pequeño si encima le suelen dar la razón a él? Pero Lilí aprenderá que con un poco de comprensión por las dos partes, tener un hermano no está nada mal.