La costa occidental asturiana ofrece un riquísimo mosaico de paisajes, con infinidad de azules y verdes, y es el escenario de apasionantes capítulos de historia y de tradiciones, así como de una cultura milenaria conservada por las gentes de estas tierras, tan ligadas secularmente al mar.;La rasa costera occidental conforma una franja relativamente estrecha —aunque es la más ancha de Asturias, salvo en la zona del cabo Peñas—, que limita al norte con la línea de costa y al sur con las primeras sierras interiores, y en ella se diseminan aldeas, villas y pueblos, con casas que cambian los tejados negros por rojos según se avanza hacia el centro de Asturias.