978-84-9041-490-3
PLAY!
MARIA GOIRICELAYA BURON
Editorial: ACADEMIA ARTES ESCENICAS CENTRO DRAMATIC Fecha de publicación: 01/03/2024 Páginas: 92Formato: Rústica
Dos pallassos vells amb poca gràcia i dos fills perduts en si mateixos, la transgressió de l'art i l'èxit. Es tracta d'una família de joglars, embrancada en la creació d'un nou espectacle, que s'entenen més posant-se màscares que mirant-se als ulls. Serà l'últim espectacle?
'Travy' és un homenatge a la família Pla-Solina alhora que un (des)encontre entre dos corrents teatrals: el clown i el teatre folklòric, d'una banda, així com les formes postdramàtiques i teatrals, de l'altra.
Edición de Fausta Antonucci
A los veintinueve años, y tras haber compuesto un buen número de obras para los corrales de comedia, Pedro Calderón de la Barca logró una pieza de capa y espada modélica: La dama duende, amenísimo juego de amores, dudas, osadías y desplantes, cifrados en la tramposa alacena que preside y engrana una acción dramática magistral en su progresión y que se alimenta sobre todo de la confusión y el engaño.
En la presente edición de la Biblioteca Clásica de la Real Academia Española, Fausta Antonucci ofrece una anotación exhaustiva de la pieza y un estudio minucioso de su recepción e interpretaciones, presididos por un texto depurado hasta el menor detalle, para el que ha considerado todos los testimonios impresos y manuscritos del siglo XVII, que dan cuenta de la enorme fortuna de la obra tanto sobre las tablas como en las prensas.
Ese éxito resiste al paso del tiempo y todavía hoy La dama duende es uno de los títulos más conocidos, estudiados y representados de la obra cómica de Calderón.
Dos obras maestras de uno de los dramaturgos más grandes de la literatura universal.
Molière, el mejor comediógrafo francés de todos los tiempos, llevó a escena la crítica de su sociedad en un momento en que Luis XIV pretendía hacer de su corte un espacio de civilidad; el cambio que quería imprimir a su reinado tuvo en el dramaturgo un agente que reprobaba por primera vez desde el escenario costumbres como el poder omnímodo de los padres sobre los hijos, la falta de libertad de las mujeres a la hora de elegir marido o la hipocresía tanto religiosa (El Tartufo) como social (Don Juan).
Las preciosas ridículas le ganó el favor de Luis XIV; el rey vio en el comediógrafo una posibilidad para difundir desde el escenario nuevos comportamientos sociales que ayudaran al cambio que pretendía. La comedia ridiculiza el movimiento de las «preciosas», que trataban, desde los salones aristocráticos, de imitar el lenguaje de esos ambientes. El éxito fue tan inmediato y rotundo que hizo de Molière en ese momento un «colaborador» de las intenciones reales.
Con Los enredos de Scapín el dramaturgo volvía, tras El Tartufo, Don Juan y El misántropo, a la comedia-farsa, con un criado enredador que heredaba la comicidad de la commedia dell?arte. Sus intrigas logran cumplir los deseos de sus «protegidos», dos jóvenes enamorados que solo quieren salvar su amor, burlando los intereses matrimoniales de los padres.
• Versión para teatro escolar: Dioni Torres.
• Propuesta didáctica y documentos: Rebeca Vázquez Vigil
En Sortientes asistimos a las peripecias urdidas por el viejo Lisidamo para disfrutar de los favores sexuales de la joven Cásina con la connivencia de su capataz Olimpión, mientras Cleóstrata, esposa de Lisidamo y conocedora de las intenciones de su marido, recurre a la ayuda de su esclavo Calino para impedirlo y conseguir que sea su hijo Eutinico el que disfrute de la joven. Será un sorteo, de ahí el título de Plauto, el que dirima al triunfador de la disputa por la posesión de la joven, aunque las cómicas y pícaras situaciones que se vivirán tras ese sorteo, harán que la comedia se desarrolle y concluya de manera inesperada.
Un batir de alas, un relámpago, un golpe contra el suelo. Satán se retuerce de dolor. Nace el dolor. Satán se levanta. Nace la rebelión.
Dios y Satanás, obediencia o rebeldía. Adán y Eva. Estos cuatro personajes protagonizan este cuento lleno de rabia y furia, contado por un ciego, Milton, que significa una cantidad considerable de nuestra cultura occidental.
Pero este Paraíso perdido es de Helena Tornero, una escritora extraordinaria para un cuento extraordinario. A la manera de los griegos Helena hace suyo el relato y el valor de los personajes cambia desde su mirada. Al texto de Tornero, autora, directora y traductora teatral, se le suman las magníficas ilustraciones de Paula Bonet. Este Paraíso perdido es una delicia para hacer teatro. Todo es sugerencia, símbolo, y la palabra es música.