Nerea, una mujer insegura que no confía en los hombres. Hugo, un hombre mujeriego que jamás se ha enamorado. Tres amigas muy liantas y dos cincuentones muy celestinos. ¿A qué esperas para descubrirlos?
¿Qué pasaría si lo que has soñado desde pequeña se hace realidad cuando menos te lo esperas?
Desde que Nerea era una niña, su padre le relataba el mismo cuento: cuando fuera mayor un día alguien especial la despertaría con un beso de amor, como si de la bella durmiente se tratase. Pero esas cosas pasan cuando uno menos lo espera.
Nerea no ha tenido suerte en el amor. Su novio de toda la vida resultó ser un mentiroso, lo que la hizo desconfiar de todos los hombres. Así que, para olvidarse, decide irse con sus amigas a Gandía al hotel Villa Magic, del que su padre es director y donde ha veraneado desde muy niña.
Durante tres meses, podrán disfrutar de la playa, el verano y su amistad. Y quizá, de un nuevo amor.

Cuando Sara descubre sus fotos desnuda en una revista, piensa que Abel la ha traicionado. Cansada de tantos secretos, decide darse un tiempo con él. No obstante, la atracción que siente es demasiado fuerte y retoman una relación en la que los juegos eróticos los sumergen en una tentación sin límites. Mientras intentan averiguar quién robó las fotos, Sara empieza a meterse en el mundo de la moda, ya que diversas firmas están interesadas en ella. Esto no parece hacer ninguna gracia a Abel, el cual se muestra cada vez más extraño. Y es que los fantasmas del pasado siempre retornan, y esta vez no quieren marcharse. Sara descubre poco a poco los oscuros secretos de Abel y se ve arrastrada por ellos.
Tiéntame sin límites es la continuación de Tiéntame, una historia llena de sensualidad, amor y secretos.

Un apasionado triángulo erótico, lleno de romanticismo, con citas literarias, música y sexo
Sara es una joven universitaria muy responsable, nerviosa y tímida. Solo ha tenido una relación en su vida y no le interesan los hombres en ese momento. Su vida da un giro de 180 grados al conocer a Abel.
Abel es un hombre culto, inteligente, sabe escuchar y hablar. Duro, pero también cariñoso. Misterioso, cálido, frío a veces; otras, cariñoso. Pero tiene un gran punto a su favor: cuando ama, lo da todo.
Entre ellos crecerá una irrefrenable pasión que les llevará a compartir tórridos encuentros en los que Sara conocerá todos los placeres del sexo. Pero Abel es también un hombre atormentado por el pasado y Sara tendrá que enfrentarse a esos fantasmas y a las mujeres que han compartido cama con el irresistible fotógrafo.
Sara se adentrará en el mundo de la moda y descubrirá lo maravilloso y difícil que puede ser al mismo tiempo. ¿Quién dijo que el mundo de la fotografía fuese sencillo?
Una novela erótica de estilo ágil y directo, que atrapa al lector desde la primera página y que lo tiene todo: personajes reales y creíbles, historias hermosas, dramáticas y divertidas, llenas de besos, caricias y susurros en las que se intercalan intensas escenas eróticas en un apasionado triángulo erótico-amoroso.

«Un apasionado triángulo erótico, lleno de romanticismo, con citas literarias, música y sexo.»
Sara es una joven universitaria muy responsable, nerviosa y tímida. Solo ha tenido una relación en su vida y no le interesan los hombres en ese momento. Su vida da un giro de 180 grados al conocer a Abel. Abel es un hombre culto, inteligente, sabe escuchar y hablar. Duro, pero también cariñoso. Misterioso, cálido, frío a veces; otras, cariñoso. Pero tiene un gran punto a su favor: cuando ama, lo da todo. Entre ellos crecerá una irrefrenable pasión que les llevará a compartir tórridos encuentros en los que Sara conocerá todos los placeres del sexo. Pero Abel es también un hombre atormentado por el pasado y Sara tendrá que enfrentarse a esos fantasmas y a las mujeres que han compartido cama con el irresistible fotógrafo. Sara se adentrará en el mundo de la moda y descubrirá lo maravilloso y difícil que puede ser al mismo tiempo. ¿Quién dijo que el mundo de la fotografía fuese sencillo?
Una novela erótica de estilo ágil y directo, que atrapa al lector desde la primera página y que lo tiene todo: personajes reales y creíbles, historias hermosas, dramáticas y divertidas, llenas de besos, caricias y susurros en las que se intercalan intensas escenas eróticas en un apasionado triángulo erótico-amoroso.»

Malena es una chica XXL directa y mordaz, un desastre con tacones harta del género masculino. Hasta que se queda prendada del estríper que la encandila una noche de juerga y que cubre su rostro con un antifaz
Malena, enfermera de profesión, es una chica que siempre fue la gordita. Un día su amiga Paula la lleva a un club de estriptease donde conocerá a su príncipe azul. Un estríper que oculta su rostro con un antifaz.
Para conservar su piso Malena ha de hacerse pasar por lesbiana, requisito indispensable impuesto por los dueños de su piso. ¿Podrá Malena aguantar la tentación de convivir con 3 tíos esculturales que suelen pasearse ligeros de ropa? ¿Y si uno de ellos, Bela, fuera un compañero de trabajo con el que Malena no se lleva especialmente bien?
El enredo y las risas están asegurados en esta novela en la que la protagonista nos recuerda a la divertida Bridget Jones.

Una historia de amor clandestina entre la pasión, el sexo y los negocios, en pleno corazón de Manhattan, donde nada ni nadie es lo que parece ser.
¿Qué ocurre cuando el placer se mezcla con los negocios? ¿Hacia qué lado se inclina la balanza?
Para Erika Osborn, no existe ninguna duda. Envidiada hasta la saciedad por sus compañeras y adorada por todo el género masculino en general, es una mujer joven pero con talento que sabe lo que quiere, muestra determinación y cuyos ojos claros levantan pasiones allá por donde va. Secretos escondidos a plena luz del día que suceden en la ciudad de Nueva York, desde el rascacielos más imponente hasta el callejón menos transitado. Testigo de una pasión que no puede controlar, es cómplice de una relación con el hombre de sus sueños, capaz de dejarla sin respiración con una palabra susurrada en el momento oportuno. Dispuesta a llevarlo hasta sus últimas consecuencias. Todo puede suceder si se sabe llevar con discreción. Un juego a dos bandas en el que nada es lo que parece.
Sexo, trabajo, celos y compromiso...

Una historia de amor clandestina entre la pasión, el sexo y los negocios, en pleno corazón de Manhattan, donde nada ni nadie es lo que parece ser.
¿Qué ocurre cuando el placer se mezcla con los negocios? ¿Hacia qué lado se inclina la balanza?
Para Erika Osborn, no existe ninguna duda. Envidiada hasta la saciedad por sus compañeras y adorada por todo el género masculino en general, es una mujer joven pero con talento que sabe lo que quiere, muestra determinación y cuyos ojos claros levantan pasiones allá por donde va. Secretos escondidos a plena luz del día que suceden en la ciudad de Nueva York, desde el rascacielos más imponente hasta el callejón menos transitado. Testigo de una pasión que no puede controlar, es cómplice de una relación con el hombre de sus sueños, capaz de dejarla sin respiración con una palabra susurrada en el momento oportuno. Dispuesta a llevarlo hasta sus últimas consecuencias. Todo puede suceder si se sabe llevar con discreción. Un juego a dos bandas en el que nada es lo que parece.
Sexo, trabajo, celos y compromiso...

Malena es una chica XXL directa y mordaz, un desastre con tacones harta del género masculino. Hasta que se queda prendada del estríper que la encandila una noche de juerga y que cubre su rostro con un antifaz
Malena, enfermera de profesión, es una chica que siempre fue la gordita. Un día su amiga Paula la lleva a un club de estriptease donde conocerá a su príncipe azul. Un estríper que oculta su rostro con un antifaz.
Para conservar su piso Malena ha de hacerse pasar por lesbiana, requisito indispensable impuesto por los dueños de su piso. ¿Podrá Malena aguantar la tentación de convivir con 3 tíos esculturales que suelen pasearse ligeros de ropa? ¿Y si uno de ellos, Bela, fuera un compañero de trabajo con el que Malena no se lleva especialmente bien?
El enredo y las risas están asegurados en esta novela en la que la protagonista nos recuerda a la divertida Bridget Jones.