El título del libro, Momentos del fundador de la Universidad de Navarra, es expresivo de su propósito. Se detiene en unos pocos momentos de su vida relacionados con la Universidad y desde ellos da noticia de algunos aspectos de su modo de ser. El autor ha intentado acercar a un público amplio –no sólo circunscrito a la Universidad de Navarra– algunos pasajes, acontecimientos y llamaradas del fundador de esa institución, para que les acompañen a entenderla mejor y a ser fieles –a lo largo del tiempo– al espíritu y al alma de su fundador.
El texto parte de la base de que ya se han publicado las homilías, discursos e intervenciones públicas de san Josemaría en su trabajo como fundador y Gran Canciller de la Universidad, de muy variadas formas, y por esta razón en este libro el autor sólo se sirve de estas citas brevemente, sin hacerlo in extenso. San Josemaría es una figura universal muy atractiva. Confesaba con humildad, porque no era mérito suyo sino don de Dios, que tenía «una fe gorda, que se podía cortar», una fe compacta, grande, con cuerpo. Dios le hizo entender de forma radical y transformadora el sentido del bautismo cristiano, la filiación divina –saberse hijos de Dios–, la llamada universal a la santidad, el valor santificador y santificante del trabajo limpio y bien hecho, y el camino divino del amor humano.

Esta publicación pretende ahondar en los años de formación como escritora de Ernestina de Champourcin, de 1905 a 1940, desde su origen aristocrático y conservador, heredado de la tradición familiar, hasta su evolución hacia posturas más personales y abiertas, que contribuyeron a dinamizar el papel de la mujer en la década de los años veinte y treinta del siglo XX en España. Se contextualizan a lo largo del libro las cuestiones que fueron prioritarias para Champourcin: la poesía, la mujer y la vanguardia, y el espíritu de concordia.
Con estas páginas se trata de sacar a la luz a esta mujer, que promovió un cambio de mentalidad y que fomentó la sinergia entre las mujeres modernas como ella. “Las cosas que dijo, escribió e hizo Ernestina han terminado teniendo gran importancia. (…) Ese silencio impuesto sobre su persona y poesía (…) está llegando a su fin”1. La figura de Ernestina despierta en quienes se acercan a ella no solo el interés por conocer a una mujer que luchó por conquistar el espacio público a comienzos del siglo XX, sino también el deseo por avanzar propuestas interpretativas que puedan servir de apoyo a futuras investigaciones.