978-84-1324-072-5
Estética ecológica y filosofía de la historia (Hermenéuticas contra la Violencia III)
OÑATE TERESA
Editorial: Dykinson Fecha de publicación: 12/03/2019 Páginas: 380Formato: Rústica
Encontramos aquí un desarrollo del concepto de soberanía tan original y atrevido como metódico y riguroso. Una investigación no política que —solicitando siempre lo político— privilegia la reflexión filosófica, literaria, psicoanalítica, lingüística, etc., para poner de relieve, por encima del texto, las sutiles estrategias que el paso silencioso del lobo soberano impone desde antaño. Una deconstrucción de la soberanía que muestra las violentas raíces teológico-políticas de su concepto.
Encontramos aquí un estudio, tan singular como completo, del pensamiento de Jacques Derrida. El texto apela a la totalidad de la obra escrita del filósofo y, de mano de la soberanía, atraviesa de principio a fin y de fin a principio todos los puntos relevantes de la deconstrucción derridiana echando por tierra la idea de una kehre en su pensamiento al exponer la divisibilidad infinita como nexo de unión.
Encontramos, pues, aquí, un texto dividido, guillotinado, bicéfalo, dos textos en uno que no se detiene en el análisis sino que avanza el paso inevitable del curso soberano, las huellas de su porvenir. Una investigación que demuestra la división como fragilidad interna del poder al tiempo que propone una división efectiva de la soberanía.
El presente estudio pretende mostrar cómo Häberle es ante todo y más allá de cualquier otra consideración un buen Filósofo del Derecho, -especialmente visible a través de su faceta de “pedagogía universitaria ”- que ostenta una proyección simultánea de doble cuño culturalista-institucionalista, pese a haber hipertrofiado a nivel bibliográfico su faceta de jurista constitucionalista y, en menor medida, la de eclesioestatalista pues mantenemos que en todo momento se perfila una estructura iusfilosófica básica subyacente ínsita a sus obras, obras que sin embargo presenta mayormente como “teorias jurídicas” haciendo uso en parte de la nomenclatura propia de “la concepción científica del Derecho” heredada de la línea iusfilosófica de su maestro K. Hesse ("Das Recht als Rechtswissenschaft") y, en parte, por razones de puro marketing -alentado por las propias editoriales-, en vistas a la comercialización de sus libros, siempre mucho más vendibles con títulos como “Teoría constitucional ” que con el más prosaico de “Elementos de Filosofía jurídico-constitucional”.