Si algo es seguro es que tu perro sabe sentarse, permanecer quieto o venir hacia ti. De lo que se trata es de que lo haga cuando tú se lo pidas, y además esté encantado de hacerlo. Y eso es tan sencillo como que descubra que hacer lo que tú le pides… ¡siempre tiene premio! (sea un trozo de salchicha, un elogio, un rato de juego o una caricia). Patricia McConnell y Aimee Moore, dos expertas en adiestramiento canino que acumulan miles de horas explicando a humanos cómo entenderse mejor con sus perros, presentan en este libro un programa de 6 semanas en el que detallan paso a paso cómo empezar a avanzar en la buena dirección, con las mejores estrategias (y también los errores que deben evitarse) para que tanto tú como tu perro descubráis que esto es sólo el principio de una gran relación.

¿Cómo es posible que su perro se siente con toda parsimonia cuando usted le está pidiendo precisamente que acuda a toda prisa? ¿Por qué ladra todavía más fuerte cuando usted le dice que deje de hacerlo («calla, calla, ¡CÁLLATE!»)? ¿Por qué será que le mira con esa cara de sufrida resignación cuando usted le está felicitando con efusivos abrazos?

Six Sigma in the Pharmaceutical Industry is the first book to introduce the fundamentals of Six Sigma, examine control chart theory and practice, and explain the concept of variation management and reduction applied specifically to the pharmaceutical industry. The first half lays out a conceptual framework for understanding variation, while the second half introduces control chart theory and practice. Using case studies and statistics, the book illustrates the concepts and explains their application to actual workplace improvements. Providing the basis for a complete operating philosophy, this book focuses on core concepts and their implementation to improve the existing products and processes in the pharmaceutical industry.
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Statistics for the Biological Sciences
Analysis & Pharmaceutical Quality
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¿Cómo es posible que su perro se siente con toda parsimonia cuando usted le está pidiendo precisamente que acuda a toda prisa? ¿Por qué ladra todavía más fuerte cuando usted le dice que deje de hacerlo («calla, calla, ¡CÁLLATE!»)? ¿Por qué será que le mira con esa cara de sufrida resignación cuando usted le está felicitando con efusivos abrazos? REEDITADO EN EDICIONES INVISIBLES.