Testimonio directo de un grupo de alcaldes comprometidos que trabajaron denodadamente por conseguir que las aspiraciones del pueblo, al que representaban, fueran escuchadas durante los años cruciales tras el franquismo. Asumiendo una responsabilidad política que ninguna institución estaba dispuesta a afrontar, lucharon por la consecución de la amnistía, impulsaron junto con Telesforo Monzón las reuniones de Txiberta en la primavera de 1977 y negociaron la legalización del uso de la ikurriña. Este libro pretende reunir las experiencias de estos alcaldes, rescatarles del olvido histórico y rendir un pequeño homenaje a quienes serán recordados como el Grupo de Bergara.

Un canto a la tenacidad vasca; a la entrega de una vida, por una apuesta, por un ideal de vida. En 1900, con 15 años, Guillermo Larregui había salido del barrio pamplonés de Errotxapea, rumbo a América. Tenía cumplidos los 49 años cuando hizo la apuesta de irse con una carretilla desde la Patagonia a Buenos Aires; total, 3.400 kilómetros no son nada para un vasco que ha dado su palabra. Fue su primer viaje. Luego siguieron catorce años tirando de la carretilla y de una aureola de popularidad y reconocimiento. Desde las cataratas de Iguazú, donde se quedó a descansar para siempre, Larregui nos sigue recordando que, con empeño, los vascos pueden conseguir lo que quieran. Vivir libres, por ejemplo.