La hija de la mujer de la limpieza (The chrawoman’s daughter) en una de las obras más conocidas y leídas de la literatura irlandesa, si bien no se había traducido al español hasta nuestra edición del año 2007. Su autor, James Stephens, era coetáneo de James Joyce, con el que tuvo relación de amistad. Se trata de una novela ligera, luminosa, que, en los primeros años del siglo veinte, narra la vida soñadora de una joven humilde, hija de una fregona que quiere para ella una vida mejor, y que sufre el acoso de un policía. Las calles y los parques de un Dublín pueblerino son el escenario de una historia que no solo es deliciosa sino que además… acaba muy bien.

James Stephens (1880 o 1882 - 1950), el escritor irlandés íntimo amigo de James Joyce (éste llegó a proponerle que le ayudase a terminar su "Finnegans's wake") hace una sutil, suave e irónica radiografía física y emocional del Dublín más poble y popular de principios del siglo XX-
"Su madre casi nunca se lavaba. Mantenía que la limpieza no era buena para la salud y que apagaba el brillo natural del rostro, y que, además, el jabón o bien atirantaba la piel o la arrugaba. Su propio rostro estaba tirante en algunos puntos y fláccido en otros, y Mary Makebelieve pensaba que las zonas tirantes eran las que su madre solía lavarse cuando era joven, y las fláccidas aquellas que nunca había aseado."