La vida hay que tomarla con amor y con humor. Con amor para comprenderla y con humor para soportarla.

Una apasionante historia documentada sobre la cruda realidad de nuestro tiempo.

«Vivimos en un mundo donde proliferan los libros que hablan de cómo conseguir la felicidad. Pero seamos honestos, tal y como están las cosas, nada nos librara del sufrimiento en algún momento de nuestra existencia. Hay que vivir la vida, que luego llega la muerte y se acabó. ¿Pero es eso cierto? Os invito sencillamente a plantearos la cuestión y os doy mi propio enfoque para la felicidad, basándome en personas que dedicaron su vida a estudiar esos fenómenos del más allá que tantos intereses hay en tapar.»

Este libro narra la historia de una persona que se enamoró de la persona inadecuada y cayó en una locura transitoria de amor. Este episodio la llevó al mundo de la Psiquiatría, de cuyas redes ya nunca pudo escapar. Desde enfermedades ficticias, hasta el paso por un psiquiátrico, donde no solo vio la muerte de un compañero por culpa de las medicaciones, sino que estuvo a punto de ver la suya propia, pretende crear conciencia entre la gente de que en una enfermedad psíquica hay algo más que problemas químicos y de que los medios que nos dan los mercados farmacéuticos no solo no curan en muchos casos, sino que además de hacer muertos en vida debido al estigma social, pueden incluso matar.