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El Imperio otomano se alió con Alemania y AustriaHungría en la Primera Guerra Mundial. Eso dio lugar, entre otras consecuencias catastróficas, a que la guerra durase dos años más de lo que habría debido, a las dos revoluciones rusas de 1917 y a la dictadura bolchevique, al genocidio del pueblo armenio, a quince millones de muertos y a la desmembración del Imperio otomano, con el nacimiento en Oriente Medio de una miríada de nuevos estados cuya inestabilidad social, económica y política sigue sin resolverse un siglo después.
Si en los albores de la I Guerra Mundial el crucero de batalla alemán SMS Goeben, aislado en medio del Mediterráneo, no hubiera esquivado a fuerza de audacia y astucia a las armadas francesa y británica, para buscar refugio más allá de los Dardanelos, nada de todo eso habría ocurrido.
Ésta es la historia no sólo del Goeben, sino también del hombre que lo comandaba, la historia de un hombre que, actuando por su cuenta, bajo su propio criterio, cambió el destino del mundo.
Tras el desastre de la Gran Armada, Baltasar de Zúñiga consigue arribar a las costas españolas, acompañado por su escolta y compañero Juan Lobo. Su misión: informar al rey. Tras hacerlo podrán descansar. Sin embargo, ya de vuelta a casa, Zuñiga tiene una nueva misión para Juan: deberá acompañar y proteger a dos inquisidores a los que se les ha encargado investigar la desaparición de varias muchachas en un pueblo de Toledo.
Sin embargo, la situación en el pueblo será mucho más compleja de lo que pensaban pues rápidamente descubrirán que en la villa se ha instalado un clima de terror y que los vecinos declaran haber visto a brujas y demonios entre sus calles. Ahora será necesario investigar si realmente Satán ha descendido de los cielos para castigar una vez más a los hombres o si lo que está ocurriendo en la villa nada tiene que ver con los poderes demoníacos.
El «Quinteto de Aviñón» comenzó a publicarse en 1974 y es el legado definitivo de Lawrence Durrell. Cada una de las novelas que lo componen (Monsieur, Livia, Constance, Sebastian y Quinx) puede leerse de forma independiente, pero la reunión de las cinco ofrece el último estadio de lo que el autor definió como su universo heráldico, basado en el simbolismo budista de los cinco elementos que conforman la personalidad del ser humano.
Quinx cierra este portentoso ciclo y supone el compendio de todos los hilos narrativos que Durrell trazó a lo largo del resto de títulos. A través del grupo de jóvenes que ya conocemos, el autor reflexiona sobre las claves filosóficas y estéticas que configuraron la posguerra europea, así como una narración plena de sabiduría y humor mordaz. De esta forma, mediante un maravilloso juego de referencias a otras novelas y de relatos dentro del relato, Durrell destaca en la creación del entorno, en la mitificación de un lugar exótico elevado muy por encima de la realidad. Con ello, sin duda, su obra literaria es de primera magnitud, poderosa y deslumbrante.
Por fin, tras muchos años de ausencia en el mercado en lengua castellana, vuelve a ponerse al alcance de público en general la obra magna de Lawrence Durell, El Quinteto de Aviñón, al completo, que junto a El Cuarteto de Alejandría son quizás sus obras más emblemáticas.