La perspectiva fue una de las invenciones m s importantes delRenacimiento. Con ella, el arte occidental experimentó el mayor viraje de toda su historia. La imagen en perspectiva es hoy omnipresente yha sido exportada al mundo entero. Pero su dominio nos hace olvidarque en modo alguno reproduce nuestra visión natural.El mundo isl mico conoce una mirada completamente distinta, que seexpresa claramente en su arte. A diferencia de la imagen occidental,el arte isl mico no est  ligado a ninguna posición personal en elmundo y trata de aproximarse a algo que es en s¡ irrepresentable.La invención occidental de la imagen en perspectiva se debe, sinembargo, a un descubrimiento hecho en el mundo  rabe ya en el sigloXI. Inmerso en una cultura sin im genes, el matem tico Alhac‚nconcibió una teor¡a de la percepción que creó las condiciones quehicieron posible la perspectiva pictórica occidental.Belting explica en qu‚ se distinguen Occidente y Oriente en surelación con las im genes, aunque una vez partieran ambos de la mismateor¡a. Pues en vez de reproducir el mundo, el arte  rabe tuvo portema la luz y su geometr¡a.

Hasta entonces, en la vida de Leonard Ángel había habido una embriagadora sensación de eternidad. Llega ahora el punto final de la infancia con los cálidos veranos junto al río, el bachillerato recién acabado, un futuro henchido de posibilidades y Mario, el amigo del colegio, a quien comienza a amar con ternura. Una tarde de primavera, todo esto se hunde en un abismo, en la sospecha de que hay “algo radicalmente discordante dentro de sí mismo”.
Un enorme vacío interior le empujará a una serie de inmediatas aventuras eróticas, a catástrofes y excesos. Emprende la huida yendo a estudiar a Viena, donde Feline, asaltada por el mismo vacío, y el chapero Tiago le arrastran a un torbellino autodestructor del que no le liberan ni un salto al Danubio ni el refugio en la casa de su hermana, en el Mediodía francés. Sólo en el encuentro con Boris halla la búsqueda su meta. Obsesionado por el deseo de reconquistar su vida al lado de este hombre, comienza a escribir su historia.
Surge así el apasionado autorretrato de un joven que indaga su propia verdad y que, al describirla, expone por qué, en realidad, no es posible afrontar la vida –y, de poder, es sólo con la ayuda de la literatura.
A través de un concierto magistral de varias voces narrativas, Hombre Ángel analiza la credibilidad de los recuerdos y de la narración coherente de una biografía.
“El estilo de Geltinger está sembrado de imágenes y utiliza un lenguaje denso, sin falsos pudores, por el que transita un hálito libre y refrescante acorde con el espíritu del tiempo.”(Joachim Helfer).
Gunther Geltinger nació en 1974, en Erlenbach del Meno, estudió para guionista y dramaturgo en Viena y asistió a la Escuela de Arte y Comunicación de Colonia. Ha participado en el taller de narrativa del Colloquium Literario de Berlín y ha obtenido la beca Rolf-Dieter de Colonia, ciudad donde reside como escritor independiente. Hombre Ángel es su primer libro.
Traducción: Marciano Villanueva Salas

Según la interpretación que Hans Belting ofrece del tríptico El jardín de las delicias de El Bosco, ésta no es una obra secretamente herética, ni representa una concepción personal de los dogmas de la Iglesia, ni es una singular y opulenta ilustración del relato bíblico de la Creación; según él, no se trata sino de la pintura de una utopía, que sólo pudo brotar del «espíritu de la época» y que es necesario relacionar con las teorías humanistas de Tomás Moro y Willibald Pirckheimer.

«Este es sobre todo un libro de experiencias humanas», nos dice Max Hastings, autor de libros tan valiosos como Armagedon, Némesis y La guerra de Churchill, que ha querido culminar su carrera como investigador de la historia de la Segunda guerra mundial con una ambiciosa visión global, que se aparta de las que se han publicado hasta ahora por el peso que da a las experiencias vividas.
«Hombres y mujeres de un buen número de naciones -nos dice- se han afanado por buscar palabras con las que describir lo que vivieron?». Valiéndose de estos testimonios de quienes participaron en la guerra en los más diversos escenarios del planeta, Hastings enriquece el relato de bombardeos, batallas y crímenes de guerra con una dimensión humana que los transforma. Esta no es la visión histórica tradicional, elaborada a partir de los que han dichoy escrito políticos y generales, sino un relato coral, construido conlas voces de los de abajo, víctimas y verdugos, que nos ofrecen una imagen nueva y distinta.

Hablando de Sexo con Cristina ofrece una mirada humana, rigurosa y optimista a los interrogantes que puedan surgir en torno a la sexualidad humana. El libro recoge los mejores momentos que se han vivido en el espacio Amor y sexualidad del programa radiofónico La Tarde con Cristina de la Cadena COPE, que se ha convertido en un referente de la divulgación sexual en España. Resume con rigor las mejores contribuciones de las sexólogas y las preguntas más francas e incisivas que los oyentes han realizado en directo a lo largo de estos años. Cristina López Schlichting y su equipo nos demuestran que es posible hablar de sexualidad y afectividad desde una mirada íntegra hacia el hombre y la mujer de hoy, sin renunciar a ninguna de sus dimensiones. Un libro para todos aquellos que entienden la sexualidad como una forma de descubrir la belleza de entregarse al otro.