La presente obra realiza un estudio de las reservas demaniales en dos partes claramente diferenciadas. La primera aborda el régimen que las reservas reciben en la legislación de patrimonio tanto estatal como autonómica, así como su delimitación de otras figuras afines. La segunda, se ocupa del estudio de las reservas demaniales en la legislación sectorial (aguas, costas, puertos, minas, hidrocarburos y espectro radioeléctrico), lo que es del todo imprescindible si se quiere llegar a conocer esta categoría de una forma completa, dada la inexistencia de un régimen jurídico único y las particularidades que esta institución tiene en los distintos sectores. El estudio del régimen sectorial nos permitirá además constatar cómo las reservas demaniales ya no cumplen únicamente la finalidad de ser el instrumento con el que la Administración utiliza los bienes de dominio público, al haberse convertido también en la herramienta con la que ésta procura su preservación y/o protección por motivos ambientales. La reserva demanial en sentido amplio es, por lo tanto, un instrumento más otorgado por el legislador a la Administración para el cumplimiento de los fines de interés general de los que es vicaria, cuando para ello es imprescindible bien la utilización de los bienes demaniales, bien su conservación o protección. Asistimos pues al ensanchamiento de la tradicional categoría de las reservas que está superando su tradicional función de uso del demanio por la propia Administración, ante el fortalecimiento y expansión de su función conservacionista.

En nuestro país el abastecimiento a población y el saneamiento se han configurado desde su origen como un servicio público de competencia municipal y prestación obligatoria lo que, además de asegurar la titularidad pública de los servicios urbanos del agua, ha impuesto su prestación de forma regular y continua. Aunque esto ha supuesto en buena medida una garantía del suministro de agua potable voces autorizadas recuerdan la conveniencia de plasmar legalmente el derecho al agua en nuestro país. Los servicios urbanos del agua se enfrentan así en la actualidad a importantes retos ante la necesidad de cumplir las exigencias derivadas de ser un servicio que da soporte a un derecho humano: el derecho de todos a disponer de agua suficiente, salubre, aceptable, accesible y asequible para el uso personal y doméstico. Es claro pues que los servicios e instalaciones que dan acceso al agua deben permitir que dispongamos de este recurso de forma fácil, en condiciones de calidad y a un precio razonable. Pero a la vez, por el principio de recuperación de costes, los servicios urbanos del agua han de ser eficientes y sostenibles, lo que requiere contar con esquemas adecuados de precios y tarifas que permitan alcanzar el necesario equilibrio entre el derecho al agua y la sostenibilidad del servicio. En esta obra se analizan algunos de los retos y dificultades que en España, Italia y Portugal representa alcanzar el delicado equilibrio que supone garantizar un servicio humano y vital como el abastecimiento a población y hacerlo de forma sostenible.