Un libro destinado a convertirse en un clásico donde se une la historia con lo tétrico, lo maravilloso y el mundo de los fantasmas en una erudición prodigiosa. La Revolución francesa fue un impresionante espectáculo, la eclosión de un conflicto social y político que se resolvió, en los momentos culminantes, con una extremada violencia. En un París ensangrentado, la fantasmagoría otorgó vida y movimiento a las sesiones estáticas de la linterna mágica. Las imágenes flotaban solas y enigmáticas en una atmósfera en la que las tinieblas de la sala hacían visibles las tinieblas del espíritu. Los seres imaginarios cobraron existencia y movimiento. Los muertos volvieron aparentemente a la vida en las sesiones masónicas de Schröpfer o Cagliostro y los espectáculos de Philidor...

A veces se pierde una palabra,
a veces pasan siglos sin que nadie
la encuentre. Como bloque de hielo
a la deriva surca las páginas
de algún libro antiguo. Es nieve
que un día se derritió en papel.
Es mancha amarilla como hoja
caída en un otoño sin viento.

Palabra sin forma, impronunciable,
sonido que se marchita y pudre,
en el papel se anega como en barro.
Cadáver sin nombre, pero también
princesa que duerme y despierta
al escuchar la palabra que fue
y había olvidado. En sus labios
los siglos recuperan la lozana
belleza que ocultaba el fango.

Ramón Mayrata

Ramón Mayrata nació en 1952. Sus primeros poemas aparecieron en la antología Espejo del amor y de la muerte (1971), compilada por Antonio Prieto y prologada por Vicente Aleixandre. Como poeta ha publicado Estética de la serpiente (1972), Una duda de Alicia (1990) y Sin puertas (1996). Como ensayista es autor de Por arte de magia (1982), El ojo de la arbitrariedad (1986) y La sangre del turco (1990). En el género del teatro hizo su incursión con La vía láctea, estrenada en 1993. Finalmente, como narrador ha publicado Si me escuchas esta noche (1991), y las novelas El imperio del desierto (1992), El sillón malva (1994) y Alí Bey, El Abassí (1995).