El sufrimiento y el dolor requieren un acompañamiento humano que ayude a soportarlos y superarlos de la mejor forma posible. Ambos forman parte de toda vida humana, poniéndonos delante de nuestra propia vulnerabilidad. Según afrontemos este tipo de situaciones y, dependiendo del apoyo que recibamos, podremos experimentar destrucción y desesperación, o acabar construyendo algo en nuestras vidas, más allá del dolor y del sufrimiento. El acompañamiento adecuado puede marcar la diferencia entre una situación de desesperación y una de esperanza. Lo que se plantea en las páginas de este libro nos pone de manifiesto una cuestión práctica, pues pretende invitar a la acción del acompañamiento desde la entrega, la responsabilidad y el amor.

El planteamiento de este libro parte de la idea de que consciencia e interioridad son dos conceptos estrechamente interrelacionados, pues con nuestra consciencia nos damos cuenta de lo que sucede en nuestro interior. El autoconocimiento es clave en el desarrollo de una vida espiritual madura. Por lo que el cultivar la consciencia es un trabajo como de ir puliendo una lente hasta que se va graduando para así ir desarrollando una capacidad de observación adecuada de nosotros mismos, de nuestra propia interioridad.