Quería salir de Málaga, pisar suelo negro de otros teatros a los que no llego caminando a casa y entonces escribí sobre mí. Una para ser honesta tiene que hablar de una. Y eso hice hablo del barrio donde nací que ya no existe, de las marcas, los motes, la conciencia social, los acentos, los toldos de los bloques, el sector servicio, los idiomas. Escribo todo lo que tenía en mi cabeza en 2019, tanto que me quedo hueca, paralizá, nave de polígono vacía por dentro. Este texto es risa y pensamiento. Es una merdellona contemporánea diciendo verdades como camperos especiales. Si te apetece teatro escrito ahora, una andaluza con poca vergüenza, monólogos fresquitos pero que pinchan y un viaje en autobús, este libro es lo que estás buscando.
PREMIO EL OJO CRÍTICO 2022 A LA MEJOR OBRA DE TEATRO PREMIO MAX 2022 A LA MEJOR OBRA REVELACIÓN PREMIO ATENEO A LA MEJOR INTERPRETACIÓN

El siglo XXI se está caracterizando por una progresiva influencia de los contenidos digitales y por una porosidad cada vez mayor entre el universo electrónico y el real. Vivimos en un mundo de pantallas, la del ordenador, la del móvil, las de los e-reader, las de las tabletas, cuyo fundamento es la información, y aquellos que sepan buscarla, manejarla, gestionarla, aprovecharla e interpretarla estarán en mejores condiciones para afrontar los retos personales, laborales y sociales de un mundo conectado y globalizado. Las competencias y habilidades en el uso de la información digital forman parte de cualquier currículum formativo. Así lo entienden las autoridades educativas, tanto a nivel internacional como nacional, estableciendo estándares obligatorios para su desarrollo. Igualmente, la práctica laboral o el desempeño de puestos de trabajo de muy diversa índole nos enfrentan a necesidades informativas que es preciso satisfacer para incrementar el rendimiento y la eficiencia. Incluso las actividades más lúdicas, como las relacionadas con el uso de las redes sociales, están impregnadas de un sustrato informativo cuyo conocimiento favorece un aprovechamiento óptimo. La respuesta a estas necesidades pasa por un conocimiento adecuado de las distintas fuentes de información existentes. Estas fuentes han ido asimilando los cambios que los procesos de comunicación han experimentado con el desarrollo de la tecnología. Libros electrónicos, revistas electrónicas, repositorios, enciclopedias, bases de datos bibliográficas, fuentes de información terminológicas, software libre, sistemas de sindicación de contenidos, gestores de referencia social, índices de citas, sistemas de búsqueda para la acreditación y reputación online, etc., constituyen un elenco de fuentes nuevas o renovadas diseñadas para favorecer la asimilación de las competencias digitales que exige la sociedad del conocimiento.

«Estraperlo» fue un término icónico de la gran Kampfzeit, o época de conflicto, de los quince años en España entre 1934 y 1949. Surgió en 1935 en un intento de chantaje acerca de un alegado soborno, aunque nunca fue demostrado por evidencia exacta. Se trató de un asunto trivial que la animosidad entre las personalidades y los intereses políticos, muy bien calculada por las izquierdas y mal calculada por los líderes del centro y derecha, convirtieron en una crisis de gobierno parlamentario, una crisis clave que en unos meses condujo al comienzo del colapso de la República constitucional. Después, el recuerdo de la palabra en el imaginario popular se aplicó más y más a la expansión del «mercado negro» en la Guerra Civil y sobre todo en la posguerra, puesto que la economía subterránea era tan importante bajo el sistema «autárquico» de fuertes controles gubernamentales y el racionamiento que condicionó la vida española en los años cuarenta. (Stanley G. Payne)
El autor en esta fascinante obra se remonta a los antecedentes y andanzas previas de Daniel Strauss y Jules Perel (o Perels), los dos aventureros extranjeros que promocionaron un aparato de ruleta fraudulento bautizado al comienzo como «straperlo» en honor de sus dueños, antes de la hispanización más fonética de este nombre artificial.

Este libro propone la teoría de la parodia como un desafío a la constitución histórica y conceptual de los valores estético-literarios. Dos son los ejes principales sobre los que María José García Rodríguez traza su mapa teórico. El primero se corresponde con los estadios epistemológicos del lenguaje: premoderno (carnavalesco), moderno (cervantino-picaresco) y posmoderno (hiperrealista). A través de ellos, la parodia se inscribe en la interrelación hombre-lenguaje-mundo. El segundo eje establece las coordenadas comunicativas de la parodia como acto de lenguaje. La intencionalidad y la interpretación se sitúan entonces al amparo de la dualidad parodiado-parodiador inherente al texto.
Lejos de resolverse como un fenómeno atemporal, la complejidad de la parodia se explica en esta teoría sobre la ambivalencia misma de la literatura como sistema de figuración.

La Ley 36/2011, de 10 de octubre, reguladora de la Jurisdicción Social, determinó la incorporación de importantes novedades en el proceso social. Desde su publicación, se han introducido importantes modificaciones en el texto legal, destacando la incidencia procesal de la Ley 39/2015, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas, que suprimió con carácter general la reclamación administrativa previa en la vía laboral. El Serie Oro de la Ley reguladora de la Jurisdicción Social comentada recoge la interpretación de estas nuevas nomas y ofrece un estudio sistemático de cada precepto realizado por juristas de reconocido prestigio. Se trata, sin duda, de una herramienta de vital importancia para el abogado y su ejercicio diario.