Aprender a medir o tempo e a distinguir as formas sempre é divertido, e máis cando viaxamos por terra, mar e aire con tantos animais. Pero un deles non emprega palabras tan usuais como grazas e por favor...

Mónica quería jugar con la luna, así que le pidió a su papá que se la bajase. El papá trajo una escalera larguísima y trepó hasta llegar a ella. La luna era demasiado grande, pero le prometió que cada noche se haría más pequeña y entonces se la podría llevar… Un libro con páginas desplegables que muestra claramente dónde debe estar la luna.