La evangelización se ha convertido actualmente en la ocupación y la preocupación fundamental de la Iglesia en general y de las comunidades eclesiales concretas. Por ello se han realizado enormes esfuerzos en la revisión y renovación de los métodos, estrategias y planes pastorales. Asimismo el primer anuncio va adquiriendo una clara prioridad. Ahora bien, todos estos proyectos ¿han ido acompañados del mismo interés por el Jesús que es anunciado?, ¿no se da por supuesto demasiado rápidamente quién es el Jesús anunciado? En la cultura actual, y en el seno mismo de la Iglesia, se han multiplicado las imágenes y las concepciones sobre Jesús, ¿en qué medida contribuye cada una de ellas a alimentar el gozo de evangelizar? Estas cuestiones y esta situación provocan incertidumbre y perplejidad en muchos corazones. Para superarlas se requiere un discernimiento comunitario permanente sobre el Jesús que anunciamos. Hacen falta por tanto criterios para facilitar ese discernimiento necesario y urgente. Es lo que pretende este libro en nuestro contexto pluralista y multicultural: ayudar a precisar de quién hablamos realmente cuando hablamos de Jesús. Es base y presupuesto para la evangelización en el momento presente.

La presente obra pretende ofrecer una visión sistemática de la eclesiología, católica, conjugando la perspectiva fundamental y la dogmática en su armonía y coherencia recíprocas. Procura situar la reflexión sobre los diversos temas en el contexto de la problemática contemporánea para identificar la postura común de la teología actual a la luz de la revelación, de la tradición y del magisterio. Esta opinión común incluye con nitidez las dimensiones bíblica, ecuménica, misionera y pastoral. La perspectiva de la eclesiología de comunión permite recoger e iluminar la experiencia vivida de la Iglesia, reconocer el protagonismo y la identidad de cada bautizado, valorar de modo equilibrado las diversas realizaciones de la Iglesia. De este modo entronca con las aspiraciones y necesidades de la actual conciencia y sensibilidad eclesial, para descubrir el gozo de la pertenencia a la Iglesia. Desde diversas perspectivas se confiesa la Iglesia una, santa, católica y apostólica, que recibe su identidad y su misión del ministerio del Dios Trinidad que se revela como salvador de un modo privilegiado en la Iglesia.

Nos encontramos no en una época de cambios sino en un cambio de época. Esta información ya habitual suele dejar en el vacío en qué consiste ese cambio.
Esta obra pretende mostrar que el factor determinante es la revolución antropológica que desemboca en el trans-humanismo y post-humanismo. Estas expresiones apuntan a la superación de la actual especie humana. Pero ya han provocado un cuestionamiento radical de los fundamentos humanistas de nuestra cultura.
Esta nueva mentalidad es la conclusión de un largo proceso, que debe ser analizado para comprender sus raíces y, sobre todo, la amplitud de sus consecuencias tanto a nivel teórico como práctico.
Y esta nueva situación cultural obliga al pensamiento cristiano y a la pastoral eclesial a perfilar su aportación singular y su testimonio original en un tipo nuevo de civilización.

Después de estos años de ministerio, poseemos ya el horizonte y la perspectiva para captar en toda su amplitud la eclesiología del papa Francisco, los presupuestos de su proyecto pastoral y el sello que está imprimiendo en la Iglesia. Con él llega al centro de la catolicidad la experiencia de unas iglesias no europeas que deben aportar su peculiaridad y su carisma. Desde su propia circunstancia despliega una mirada universal, para confrontarse con la dinámica de la globalización: como alternativa hay que configurar una globalización multipolar, una cultura del encuentro, espacios de misericordia. En este mundo real la Iglesia está llamada a la misión, a salir al encuentro de los dramas de nuestro mundo, como reflejo del Dios Trinidad que camina con la humanidad. Por eso la eclesiología de Francisco es una eclesiología desde la misión y para la misión, una eclesiología bautismal y sinodal: todos los bautizados son Iglesia y, por ello, deben unirse para caminar al encuentro de las necesidades de los más débiles y desfavorecidos

El Año Santo de la Misericordia al que nos ha convocado el papa Francisco debe tener una doble dimensión: teologal y profética. Teologal, porque es un re-descubrimiento del Dios que se revela de modo personal. Profética, porque interpela al creyente para que purifique su corazón y sus actitudes, y porque denuncia (sin amargura y sin deseos de venganza) los mecanismos y las estrategias que degradan a las criaturas y ofenden la ternura de Dios. Por tanto, desde el Dios misericordioso, la Iglesia se descubre también llamada a vivir la misericordia y a testimoniarla, como brújula de su conversión pastoral y misionera. Hablar de misericordia es contar la historia de un amor que nunca se cansa. Con estas páginas tratamos de que las personas se sientan protagonistas de esa historia que sigue abriéndose camino entre los dramas y los rostros de los más necesitados, tan amados por el Dios de la compasión y de la misericordia.

¿Cómo hacer significativo el testimonio de la Iglesia en la actualidad? ¿Qué puede aportar el cristianismo a un mundo que oscila entre sus logros y sus miedos? Estas preguntas acompañan a la Iglesia cristiana desde sus comienzos, pero se han vuelto más acuciantes en la actualidad. Este libro ofrece una propuesta clara, que recoge el centro del Nuevo Testamento: el Resucitado es el manantial de la alegría del mundo. Ese es el tesoro de la Iglesia: lo que la hace existir y lo que la empuja a la evangelización. La teología y la pastoral deben esforzarse para que el mensaje cristiano, toda la Iglesia y todo en la Iglesia, irradien el perfume de la Pascua.

Un fenómeno tan complejo como el acontecimiento-Fátima se impone como un desafío y como una exigencia para la reflexión teológica. El núcleo del Mensaje de Fátima refleja, desde distintos puntos de vista, el corazón mismo de la revelación. Su lenguaje expresivo y su revestimiento simbólico se levantan como una protesta y como una propuesta en circunstancias concretas del mundo y de la Iglesia.
Fátima nos permite profundizar en la lógica más radical de la revelación del Dios Trinidad: el amor de Dios se manifiesta como misericordia para superar, desde dentro, los dramas de la historia humana, y los pastorcillos son los testigos de esos designios de misericordia que les fueron anunciados.

Pese al enorme reto que ya supone su selección, estos “100 Momentos-clave de la Teología Cristiana” nos permitirán recorrer el esfuerzo gigantesco que las Iglesias cristianas han hecho a lo largo de los siglos para pensar su identidad y misión a través de circunstancias, sociales, culturales y políticas tan cambiantes y complejas. En el segundo milenio la división se hace por siglos, ya que, más o menos en cada uno se produce una gran inflexión de circunstancias. Y en el s. XX nos detenemos con más detalle en la Iglesia Católica.

Hablar de Dios es más necesario y más hermoso precisamente cuando ha dejado de ser una evidencia cultural. El creyente tiene la responsabilidad y el gozo de contar y de testificar el esplendor y la desmesura del Dios de la revelación.
Podrá hacerlo si es consciente de las posturas de quienes no piensan como él: ¿quién es el Dios al que niegan los ateos?, ¿qué aman realmente cuando niegan a Dios?, ¿qué piensan de Dios los miembros de otras religiones?, ¿cómo dar ante ellos razón de la propia esperanza?
El cristiano debe ante todo descubrir lo más genuino y original del Dios que le ha salido al encuentro. Por eso no puede dejar de plantearse algunos interrogantes fundamentales en la actualidad: ¿cuál es el nombre auténtico de Dios?, ¿a quién ama realmente cuando ama a Dios?, ¿quién es el Dios digno de ser creído?, ¿se puede decir que todas las religiones hablan del mismo Dios?...
El amor no puede ser argumentado. Ha de ser contado y testimoniado.

Dar razón de la propia esperanza es tarea y gozo permanente de los cristianos. Especialmente en un contexto cultural en el que muchas de sus tendencias dominantes miran con indiferencia o con distancia el hecho de la fe. Esta situación provoca en numerosas ocasiones cierto complejo de inferioridad intelectual entre los creyentes. Por ello es tan importante y urgente redescubrir la dignidad de creer. Más que sentirse amenazada, es la fe la que lanza su provocación y su alternativa a lo cul-tural e ideológicamente correcto. Y ello lo ha de hacer como defensa de la dignidad de cada ser humano y de la credibilidad de Dios. Esta actitud se ha convertido para la Iglesia en España en el tema de nuestro tiempo.

ELOY BUENO DE LA FUENTE (Zamora), sacerdote diocesano de Burgos, es decano y catedrático en la Facultad de Teología del Norte de España (sede de Burgos), donde enseña Cristología y Teoría del Conocimiento. Entre sus publicaciones cabe citar: 10 palabras claves en Cristología (2000). España entre cristianismo y paganismo (reimp. 2003) y Eclesiología (2ª ed., 2004).

--- ÍNDICE GENERAL ---

PRÓLOGO
PRIMERA PARTE
LA BÚSQUEDA DE LA DIGNIDAD EN UN MUNDO TRÁGICO
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO I. La increencia como horizonte cultural
1. Una lucha por la dignidad del hombre
2. La secularización como encrucijada compartida
3. La razón científica al servicio del bienestar temporal del hombre
4. La afirmación de una razón emancipada y autónoma: el sueño de la auto-redención
5. El centro del debate: la apuesta radical de la razón
6. La modernidad (¿y la secularización?): la juez en el banquillo de los acusados
7. La encrucijada de un proyecto histórico
a) La postura neoconservadora
b) El ideal de un humanismo dialogal y comunicativo
c) La posmodernidad: la modernidad como proyecto liquidado
CAPÍTULO II. El paganismo: ¿una presencia imprevista o inevitable?
1. Un nuevo protagonista más allá de la increencia
2. El retorno de lo sagrado
3. El orgullo de ser pagano
4. Prometeo es en realidad Sísifo y puede ser Dionisio
5. Las diversas máscaras del paganismo
a) Paganismo politeísta secularizado
b) El culto idolátrico del poder mundano
c) El culto de la naturaleza como organismo vivo
d) La religión dionisíaca de la vida
6. El punto clave de la decisión
CAPÍTULO III. Un cristianismo poscristiano
1. Un cristianismo secularizado y kenótico
2. Un cristianismo posteísta
3. El cristianismo como la religión de la salida de la religión
4. La función social del cristianismo como religión
5. El cristianismo bajo el criterio de la ética
6. El cristianismo, estrategia de defensa de Occidente
SEGUNDA PARTE
LA DIGNIDAD DE LA FE CRISTIANA
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO IV. ¿Qué ha sido de Dios?
1. La imposibilidad de la comunicación: entre las paredes del mundo
a) El Dios que no existe: simplemente un vacío
b) Todavía un enemigo y una enfermedad
c) La divinización del hombre como herencia del Dios ausente
2. Un espacio sin dialogantes
a) Una contingencia que debe ser atendida
b) Un rumor entre las grietas
c) El eco de una realidad lejana
d) La herencia de un Dios ausente
3. En el umbral de la comunicación
a) La invocación desde la miseria humana
b) Lo sagrado como apertura y como clausura
c) Dios, origen y fundamento… personal
CAPÍTULO V. En el principio fue la alegría
1. El cristianismo es un hecho improbable
2. La fe cristiana nace como experiencia de alegría
a) La alegría vinculada a una persona
b) Una vida (personal y comunitaria) desde la alegría
c) Jesús y la alegría de Dios
d) El Gozo que es el Espíritu
3. El misterio de la alegría
4. La alegría como llamada y envío
a) Abrahán, el primero de los llamados
b) La llamada como convocatoria de un pueblo
c) Jesús, consumador de la fe
d) Dios también pronuncia su «heme aquí»
CAPÍTULO VI. El espacio para una revelación en libertad
1. El Dios personal ante la razón y ante la fe
2. Muéstrame tú a tu hombre y yo te mostraré a mi Dios
a) La fragilidad de los absolutos terrestres: frente a toda idolatría
b) Una razón abierta y comunicativa
c) Asombro ante la complejidad de lo real
d) Las riquezas del lenguaje
e) La pureza de la mirada
3. El espacio de la revelación
a) La primacía del don
b) El hombre como ser recibido
c) Todo acto de donación es singular e irrepetible
d) La lógica del exceso del don
e) La emergencia de lo improbable: el perdón
f) El lujo de la bondad
g) La mirada del otro como trascendencia de lo santo
h) El clamor de las víctimas: la trascendencia como nostalgia
i) El huésped desconocido que acompaña nuestra esperanza
4. Conclusión: el hombre, ser a la escucha porque ha sido interpelado
CAPÍTULO VII. El advenimiento de Dios: Dios se hace protagonista y acontecimiento
1. La revelación como concepto teológico fundamental
2. El lenguaje parabólico: Dios en el acontecimiento
3. La alegría de la presencia nueva de Dios
4. La dignidad de una nueva lógica
TERCERA PARTE
LA DIGNIDAD DE LA EXISTENCIA ECLESIAL
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO VIII. La Iglesia parábola de la Pascua
1. La paradoja pascual de la novedad cristiana
2. La celebración de la Pascua en la memoria de la Iglesia
3. La Pascua de la alianza judía como hecho revelador y salvador
a) El paso histórico de Dios
b) La teofanía de una interpelación personal
c) El espacio de la alianza
d) El pueblo de la alianza en el destino de la historia (envío y misión)
4. La alianza de la Pascua de Jesús
5. La parábola del acontecimiento fundador
CAPÍTULO IX. La Iglesia realidad personal
1. La insuficiencia de concepciones estrechas
2. La memoria del Antiguo Testamento: alianza y mediación
3. Hacia una nueva alianza: la prioridad de las personas
4. La piedra angular del nuevo templo
5. La ekklesía de la Pascua
a) La Iglesia de los hombres restaurados
b) El Templo del Espíritu y el Pueblo de Dios
c) La ekklesía entre el cenáculo y Pentecostés
CAPÍTULO X. La dignidad de un sujeto histórico
1. El cristianismo y la identidad de Europa
a) El debate en torno a la Constitución europea
b) Una mirada a la historia de Europa
c) La Iglesia madre de pueblos
2. Las invenciones del cristianismo
a) La noción de persona
b) La dignidad de los ofendidos y humillados
b) El trabajo como vocación y como servicio
d) La racionalidad científica
e) La apertura de la universalidad
f) La laicidad
3. La comunión de iglesias como Iglesia mundial
CAPÍTULO XI. En la laicidad ante el laicismo
1. Las grandezas -más allá de las miserias- de la historia
2. Entre la laicidad y el laicismo
3. Las aporías del laicismo
4. ¿La religión a favor de la laicidad frente al laicismo?
EPÍLOGO. LA PASTORAL QUE SE BUSCA