Atrapados en el petróleo

Dos personas dialogan sobre nuestro modelo económico y energético, nos muestran cómo una parte de la Humanidad avanzamos hacia esquemas de elevado consumo de bienes. Lo cual se traduce en impactos ambientales globales muy fuertes: calentamiento global, deterioro de los mares, pérdida de biodiversidad, entre otros. El siglo XX ha sido el del petróleo, este combustible fósil no sólo ha sustituido a otras fuentes de energía, ha sido el dinamizador de cambios sociales; como impulsor de la movilidad y el transporte ha traído el desarrollo del turismo y los negocios del ocio, junto con una muy fuerte expansión del comercio mundial. Nuestro actual modelo económico no se sostiene sin este combustible. Estamos abocados a buscar petróleo o sus sucedáneos para mantener el modelo, aunque con ello sobrepasemos los límites de la Tierra. Recorren A Costa da Morte diez años después del desastre del Prestige, hablan de ello, pero sobre todo de que ya hubo llamadas de atención hace cuarenta años, cuando nos plantearon que los límites del crecimiento podían ser una realidad, y luego, la crisis de los precios del petróleo, 1973, nos decía que no podíamos derrochar la energía. Es preciso cambiar a otra cultura económica y energética, no sirven sólo las soluciones tecnológicas.