"A tiny story" offers a unique and captivating perspective by bringing the microscopic world of ants to a human scale. Readers will be entranced by the innovative combination of written language and imagery that vividly narrates these tiny creatures' adventure.

The narrative and photographs are presented separately, inviting multiple interpretations, and encouraging readers to engage with the story, making it a great conversation starter between parents and children.

Fernando Maquieira, the Spanish photographer, is a master at capturing beauty in the everyday. His work evokes a deep emotional connection with his images, taking the viewer on an extraordinary visual journey. His ability to transform the ordinary into the extraordinary is truly impressive.

Ant Lea ventures out of the anthill for the first time with a group of companions in search of food, but what should have been a simple, routine mission turns into an odyssey. They are taken by surprise by an army of enemy ants, and in the chaos of battle, Lea gets lost in an unknown place. Alone and disoriented, she doesn't know how to return to the anthill. She finds herself wandering in a strange world that she must learn to inhabit and understand. It's time for Lea to grow up.

"Una historia minúscula" ofrece una perspectiva única y cautivadora al llevar el microscópico mundo de las hormigas a una escala humana. Los lectores quedarán fascinados por la innovadora combinación de lenguaje escrito e imágenes que narra vívidamente la aventura de estas diminutas criaturas.

Este relato fotográfico ofrece a los lectores una experiencia que invita a la reflexión. La narración y las fotografías se presentan por separado, lo que invita a múltiples interpretaciones y anima a los lectores a comprometerse con la historia, convirtiéndola en un gran tema de conversación entre padres e hijos.

Fernando Maquieira, fotógrafo español, es un maestro en la captura de la belleza en lo cotidiano. Su obra evoca una profunda conexión emocional con sus imágenes, llevando al espectador a un extraordinario viaje visual. Su capacidad para transformar lo ordinario en extraordinario es realmente impresionante.

La hormiga Lea sale por primera vez del hormiguero con un grupo de compañeras recolectoras en busca de alimentos, pero lo que hubiera debido ser una simple misión rutinaria se convierte en una odisea. Se ven sorprendidas por un ejército de hormigas enemigas y en el caos de la batalla se pierde en un lugar desconocido. Sola y desorientada no sabe cómo volver al hormiguero. Se ve deambulando por un mundo extraño que tiene que aprender a habitar, a conocer. A Lea le ha llegado el momento de crecer siendo hormiga.

En una época de transformación acelerada de hábitos culturales y desarrollo tecnológico, la imagen fotográfica sigue ocupando un espacio privilegiado en nuestras vidas: hoy todos hablamos fotografía. Pero bajo la alfombra de esa flamante omnipresencia yacen muchos cadáveres. De 'cosa' congénita a la sociedad industrial, la fotografía se ha convertido en 'no-cosa' de la sociedad digital. El misterio de su alquimia fundacional está cediendo a otra magia, la de los algoritmos. Todos los valores de la imagen se están alterando: el horizonte de la inteligencia artificial presagia una revolución visual mucho más profunda que la que en 1839 promovió la aparición del daguerrotipo. La fotografía se hacía con luz, ahora se hace con datos. Y en esta transición de asombro e incertidumbre vale la pena pasar revista a los ámbitos en los que la cámara sigue lidiando, en la medida en que ese esfuerzo contribuye a entender mejor el espíritu de nuestro tiempo. La postverdad fotográfica, la memoria desmaterializada, la iconofagia, la construcción de identidades y la perspectiva de género en redes sociales, los drones y la automatización de la mirada, la fotografía como un lenguaje entre máquinas, las urgencias medioambientales, la postfotografía como síntoma de la economía postliberal, las imágenes de la guerra y la guerra de las imágenes… En este libro, Fontcuberta ofrece una docena de ensayos que, concebidos como casos de estudio, nos invitan a repensar si el símil del espejo con memoria sigue siendo el elemento definitorio de la condición fotográfica o si, por el contrario, ha llegado el momento de desbordar el espejo.

Jorge Panchoaga es un fotógrafo colombiano conocido por su narrativa visual que capta la riqueza cultural y la historia de Colombia. Su obra refleja su compromiso con la identidad de su país, y ha obtenido reconocimiento nacional e internacional.

"Kalabongó" ofrece una cautivadora visión de la riqueza cultural y la importancia histórica de una comunidad de esclavos afroamericanos de la costa colombiana, que desempeñó un papel fundamental en el histórico tratado de 1605 con la Corona española.

Todas las imágenes son nocturnas porque, en palabras del autor, "la noche es cómplice de la luz de la libertad". Fueron tomadas en San Basilio de Palenque, un pueblo que en su día fue clave en la lucha por la libertad, y que ahora está en gran parte oscurecido y desconocido.

Panchoaga revela una historia profunda y conmovedora con un lenguaje gráfico impactante y visual.

Una noche de 1599, treinta personas, mujeres y hombres esclavizados, huyeron de las casas que conformaban la ciudad amurallada de Cartagena de Indias en busca de autonomía, territorio y libertad. Aún se recuerda que los cimarrones "sobrevolaban" la tierra en tiempos de lucha, enfrentándose a las tropas españolas y defendiendo a los colonos fugitivos, que durante años habitaron caseríos móviles. En 1605, tras enfrentamientos con la Corona, se les concedió un año de paz, tratado considerado el primero de este tipo en la actual Colombia. Las luchas libradas por los cimarrones y ese año de paz fueron el germen y las raíces de lo que hoy es San Basilio de Palenque. Kalabongó (luciérnagas en lengua palenquera) recorre algunos de los relatos de la memoria oral del pasado lejano y reciente en una narración que mezcla lo cotidiano con lo histórico. Los relatos de los aldeanos, así como las imágenes que componen "Kalabongó", nos recuerdan que la noche es cómplice de la luz de la libertad.